Toros

Apoteosis del rejoneo en Las Ventas: Guillermo Hermoso de Mendoza y Lea Vicens abren la Puerta Grande

El joven Guillermo Hermoso de Mendoza se consagró este domingo en Madrid, en la tarde de su confirmación de alternativa, al cortar tres orejas después de una gran actuación ante una extraordinaria corrida de El Capea, con la que también triunfó, en tono menor, la francesa Lea Vicens.

Había ganas de ver en Madrid al joven Guillermo Hermoso de Mendoza, la nueva joya del rejoneo, hijo del gran Pablo Hermoso, que, por cosas del destino, no pudo estar presente hoy para confirmarle la alternativa por un inoportuno accidente en su finca de Estella (Navarra) que le tendrá lejos de los ruedos una temporada.

La expectación era tal que no importó aparentemente la baja del veterano jinete navarro, ni que el festejo quedara en un improvisado mano a mano con la francesa Lea Vicens, que hizo de madrina de ceremonia. Así y todo, la gente respondió de manera apabullante, con el cartel de «no hay billetes» en taquilla.

Y no fallaron porque, visto lo visto, Guillermo es un prodigio del toreo a caballo. Es como ver a su padre con 30 años menos, y eso es una gran noticia. La pregunta ahora es: ¿Cómo será su evolución si ya todo lo hace a las mil maravillas? El tiempo lo dirá.

En el toro de ceremonia lo hizo todo perfecto, destacando la torerísimas batidas con «Disparate», con el que clavó en corto y arriba, y con el que templó maravillosamente bien a su antagonista con los galopes de costado y unas vistosas «hermosinas», suerte creada por su padre y que él también ejecuta a las mil maravillas.

Faena, por tanto, de corte clásico, pulcra y sin alharacas, técnicamente inmaculada, pero estropeada en la suerte suprema.

En el tercero volvió a encender los tendidos con «Berlín», con el que bordó el toreo a dos pistas, «hermosinas» incluidas, y unos arriesgadísimos cambios por los adentros. También brilló montando a «Ilusión», con el que pegó auténticos muletazos con los pechos del equino, amén de lo certero que volvió a mostrarse con los garapullos.

Un par de cortas a dos manos prácticamente sin espacio al hilo de las tablas fue el perfecto colofón a otra faena muy compacta y que fue premiada con una oreja pese a volver a faltarle mayor contundencia a la hora de matar.

Con «Berlín» siguió la exhibición de Guillermo Hermoso ante el quinto, en el que puso a los tendidos en pie con dos quiebros inverosímiles y de mucho riesgo sobre «Ecuador», caballo de gran elasticidad y con el que firmó el pasaje más rotundo de una faena abrochada con las cortas sobre «Esencial» y rematada a la primera en la suerte suprema. Dos orejas para culminar una gran actuación.

Lea Vicens llevó a cabo una emotiva faena a su primero, toro con disparo, que se dice cuando tiende a arrear más que a embestir, y con tendencia también a cortar en banderillas, viniéndose siempre muy cruzado. Ahí estuvo el mérito de la francesa y, sobre todo, de «Bético», un caballo muy valiente con el que hizo lo más brillante de una labor malograda con el rejón de muerte.

Con el extraordinario cuarto destacó en los galopes y en los preparativos de las suertes con «Diluvio», aunque en el debe hay que reseñar que le faltó ajustarse más en banderillas, abriéndose demasiado pronto casi todas las veces, lo que dio sensación de ligereza a la hora de clavar. Lo curioso es que cortó una orejita sin apenas petición, con más voces que pañuelos en los tendidos.

Ante el sexto volvió a recurrir la francesa a dos de sus mejores caballos como son «Bético» y «Diluvio» para argumentar una faena entonada y muy comunicativa con los tendidos, a pesar de ciertas desigualdades que volvió a haber en el trasteo, nuevamente a la hora de dejar los palos.

Pero la gente quería fiesta, por eso, tras un efectivo y fulminante rejón, cortó otra oreja que le abría así su segunda Puerta Grande de Madrid.

Ficha del festejo:

Cuatro toros reglamentariamente despuntados para rejones de Carmen Lorenzo y dos (2º y 6º) de El Capea, de magníficas hechuras y de extraordinario comportamiento en conjunto, destacando especialmente el cuarto y el quinto.

Lea Vicens, con chaquetilla burdeos: dos pinchazos, rejón contrario y atravesado, y siete descabellos (silencio); pinchazo y rejón en dos tiempos (oreja); rejón (oreja).

Guillermo Hermoso de Mendoza, con chaquetilla azul: medio rejón contrario, pinchazo, rejón y descabello (silencio); pinchazo, rejón y descabello (oreja); rejón en dos tiempos (dos orejas).

Actuó como sobresaliente Sergio Domínguez.

Guillermo Hermoso confirmó la alternativa con el toro «Flor», número 41, negro bragado, de 512 kilos y nacido en marzo de 2017.

La plaza registró lleno de «no hay billetes».