Sociedad
Estilista y diseñador

Novedades en el estado de salud de Juan Avellaneda: esto es con lo que tiene que convivir día a día

Juan Avellaneda ha compartido muchos detalles sobre su lucha contra el cáncer

Juan Avellaneda ganó muchas repercusión en los medios a raíz de su participación en el programa ‘Cámbiame’, un espacio producido por La Fábrica de la Tele que se emitía en Telecinco. El diseñador siempre ha intentado que su vida privada permanezca al margen de las cámaras, pero disfruta de una conexión especial con sus seguidores, ya ha cumplido 42 años y quiere que todo el mundo sepa la verdad. Esa es la razón por la que ha asegurado que convive con dolor «24 horas al día». Pero, ¿qué le pasa al artista?

Juan Avellaneda luchó contra el cáncer cuando tenía 27 años. Le detectaron un tumor en los testículos y su vida cambió de un momento a otro, pero siempre se ha caracterizado por ser una persona valiente y luchadora, así que no pensó en tirar la toalla en ningún momento.

Ya han 15 quince años desde este terrible suceso y lamentablemente los rumores vuelven a sonar con fuerza. El estilista ha explicado que todo ha sido una confusión. Hace un tiempo dio una entrevista y reconoció que estaba sometiéndose a pruebas para comprobar que todo estuviera en orden. El problema es que el periodista entendió mal sus palabras y publicó una noticia que preocupó a mucha gente.

«Lo que dije es que me han salido de nuevo unos bultitos y que estaba otra vez con revisiones médicas. De momento, está todo controlado, aunque es un poco rollo tener que volver a pasar por eso», ha explicado con total naturalidad. Por desgracia hay pacientes que vuelven a recaer en el cáncer, pero no es el caso de Juan Avellaneda. El diseñador ha hablado muy claro para zanjar el debate y la verdad ha terminado viendo la luz.

El marido de Juan Avellaneda

Juan Avellaneda ha explicado cómo han surgido los últimos acontecimientos. Notó que le estaba pasando algo, sentía algo extraño y sabía que tenía que consultárselo a su equipo médico, pero estaba retrasando la fecha porque es un proceso complejo. «Me obligué a ir porque me dolían bastante las glándulas. No me apetecía mucho a volver a pasar el proceso, pero mi marido me dijo que tenía que ir». El diseñador cuenta con el apoyo de su familia, así que tomó las riendas del conflicto y se puso en manos de sus especialistas de confianza.