Cómo detectar el cáncer de mama

Octubre es el mes dedicado a la lucha contra el cáncer de mama, una enfermedad que afecta a millones de mujeres en todo el mundo, en la que la detección precoz es determinante. Pero, ¿cómo podemos detectar el cáncer de mama?

El cáncer de mama que se detecta de forma temprana, cuando es pequeño y no se ha diseminado, es más fácil de tratar con éxito. La realización de pruebas regulares es la forma más fiable de detectarlo. Sin embargo, también existen algunas pautas de detección para mujeres con mayor riesgo de padecerlo. A pesar de esto, toda mujer puede realizarse en casa una autoexploración del pecho para detectar posibles bultos y no olvidar acudir al médico o ginecólogo de forma regular.

El objetivo de las pruebas de detección del cáncer de mama es encontrarlo antes de que se presenten los primeros síntomas (como un bulto que se puede palpar). Un cáncer descubierto durante estos exámenes de detección suelen ser más pequeños y, probablemente estarán limitados al seno. El tamaño del cáncer de mama y su extensión son algunos de los factores más importantes para predecir el pronóstico de una mujer con esta enfermedad.

Como norma general, se considera que una mujer tiene un riesgo promedio si no tiene antecedentes de cáncer de mama, un historial familiar sólido de cáncer de mama o una mutación genética conocida por aumentar su riesgo (Gen BRCA), y no ha recibido radioterapia torácica antes de los 30 años de edad.

¿Cuándo hay que hacerse una mamografía?

• Las mujeres entre 40 y 44 años de edad tienen la opción de comenzar la prueba de detección con una mamografía cada año.
• Las mujeres de 45 a 54 años deben hacerse mamografías cada año.
• Las mujeres mayores de 55 años pueden cambiar a una mamografía cada dos años, o pueden optar por continuar con las mamografías anuales. La evaluación debe continuar mientras la mujer tenga buena salud y se espere que viva 10 años más o más.

Todas las mujeres deben saber qué esperar al hacerse una mamografía para la prueba de detección de cáncer de mama: lo que la prueba puede y no puede hacer, por lo que tampoco está de más realizar en casa la llamada «autoexploración» que consiste en palpar el pecho en busca de algún tipo de bulto o quiste. Por otro lado, toda mujer debe tener en cuenta el aspecto y el tacto de sus senos e informar de cualquier cambio a su médico o ginecólogo.

Existen algunos síntomas que nos pueden llevar a detectar el cáncer de mama:

• Secreción del pezón repentina (con sangre o en una sola mama).
• Que aparezca un cambio físico como una llaga en el pezón.
• Que se produzca una irritación en la piel o algún cambio del tipo rugosidad, pliegue o escamosidad.
• Que se noten unas mamas enrojecidas e hinchadas, o que se note la piel arrugada como una «piel de naranja».
• Dolor en la mama que además no desaparece y va en aumento.

Estos síntomas podrían indicar que se tiene un cáncer de mama, por lo que, si se identificara alguno de ellos, se debe acudir al médico de inmediato. También es importante para evitar el desarrollo de la enfermedad no saltarse tampoco ninguna revisión ginecológica a partir de las edades indicadas.