Opinión

El preocupante cuadro macroeconómico

El Gobierno aprobó el martes la nueva senda de estabilidad, el techo de gasto no financiero y la actualización del cuadro macroeconómico de la economía española, que es el primer paso para que elabore un anteproyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el año 2020. Tras analizar las distintas medidas, podemos resumirlas en que las consecuencias serán más déficit y menos crecimiento, con la elevación de la previsión de la tasa de paro.

Siendo grave que flexibilice más la senda de estabilidad, tan preocupante como ello o más es el cuadro macroeconómico que ha actualizado. En dicho cuadro macroeconómico, el Gobierno ha destacado que realiza una previsión prudente, en línea con las estimaciones de los distintos organismos, y da a entender que pese a que en el último trimestre la economía española se aceleró, prefieren ser cautos. No parece que sea así.

De hecho, no parece muy prudente estimar que el consumo privado se vaya a acelerar desde el 1,1% de 2019 al 1,5% de 2020. Paralelamente, la inversión queda reducida a casi la mitad en 2020, pero proyectan una senda rápida de recuperación a lo largo de la legislatura, que no cuadra mucho con las malas expectativas existentes, que son las que hacen que la inversión se desacelere de manera acusada. Así, es probable que tenga que haber sucesivas modificaciones a la baja.

Sin ir más lejos, eso ya lo ha tenido que hacer: la previsión de crecimiento del Gobierno de Rajoy para 2020, en el 2,3%, la rebajó el Gobierno de Sánchez diez meses después de la moción de censura, en abril de 2019, al enviar a Bruselas la actualización del programa de estabilidad, para dejar el crecimiento en el 2,1%. Adicionalmente, en el plan presupuestario de 2020, enviado por el Gobierno a Bruselas en octubre de 2019, se recogía que el crecimiento económico español iba a ser del 1,8% en 2020 y que la tasa de paro iba a cerrar en el 13,8% en 2019 y que iba a descender hasta el 12,3% en 2020. Ahora, la tasa de paro de 2019 se ha elevado hasta el 14,1% y la de 2020 será del 13,6%, 1,3 puntos más que la prevista en octubre.

Esa tasa de paro del 12,3% planteada en octubre para 2020 no se alcanzará ahora, según el cuadro macro, hasta 2023, con lo que se ha producido un retardo de 3 años en esa pequeña reducción, manteniendo todavía la tasa de paro por encima del 10% de manera holgada. Y es más, dicho incremento de 1,3 puntos en la tasa de paro equivale a 300.000 personas más en el paro en 2020. Eso, junto con la senda de estabilidad, que renuncia al equilibrio presupuestario y que mantiene a la economía en déficit todos los años de la legislatura, junto con la elevación del techo de gasto en más de 7.000 millones desde los últimos presupuestos aprobados (2018), colocan a la economía española en una difícil posición en unos momentos en los que la desaceleración se intensifica, que puede ser más intensa todavía si se ejecutan las medidas de más gasto, más impuestos, más déficit y más deuda que propone el Gobierno.