El Colegio de Economistas de Madrid también critica el cupo catalán

El Ilustre Colegio de Economistas de Madrid, cuya decana-presidenta es Amelia Pérez Zabaleta, ha presentado un informe de su Comisión de Fiscalidad, presidida por Jesús Quintas, donde analiza qué provocaría el cupo catalán. En el informe, la mencionada comisión del Colegio de Economistas de Madrid señala que es inviable y que su aplicación provocaría el colapso del sistema. Adicionalmente, recuerda que los problemas de financiación de Cataluña no se deben al sistema actual, sino a la mala gestión que allí han ejercido los gobiernos de aquella autonomía, pues al comparar con Madrid, la otra región de tamaño similar, esta última, con menos recursos e impuestos más bajos ha logrado una mayor estabilidad presupuestaria; peor gestión en Cataluña que es lo que ha llevado a dicha región a tener un déficit crónico.

Por otra parte, el informe desarma también la idea de que Cataluña tenga unos mayores gastos y necesite mayor financiación por ello, ya que al comparar a competencias homogéneas no recibe menos que, por ejemplo, Madrid, y para aquellas competencias adicionales que tiene, como la policía autonómica, recibe financiación adicional.

Del mismo modo, el informe señala el potencial problema de menor recaudación derivado de la dispersión de la información tributaria al cederle todas las competencias al gobierno catalán, que puede suponer un grave quebranto en la recaudación.

Por último, recuerda que no hay nada que haya más distorsionado la financiación de las CCAA que los regímenes forales, que es lo que, a su manera, pretende conseguir Cataluña.

Así, el Colegio de Economistas de Madrid es una voz más que se une, con opinión técnica, a la crítica del potencial concierto económico catalán, con argumentos claros y cálculos cristalinos.

Como ya he escrito desde hace meses, el ilegal e insolidario cupo catalán conllevará, además de una merma de recursos para el Sistema de Financiación Autonómica (SFA), una serie de perjuicios económicos todavía más amplios y profundos para el conjunto de la economía española, que pueden desestabilizarla y agravar sus problemas estructurales, elemento que perjudicaría también, aunque lo ignoren, a las dos forales y a la propia Cataluña, por la fuerte relación interregional que hay entre las distintas economías autonómicas de toda España.

Así, lo que es inasumible, ni legal, ni conceptual, ni presupuestariamente, es romper la caja común para darle a Cataluña un volumen desmedido de ingresos, que malgastaría, mientras se quiebra la solidaridad interterritorial, con el resto de regiones bien pagando lo que Cataluña se lleva, bien dejando de recibirlo y disminuyendo sus servicios, pasando a ser ciudadanos de tercera o de cuarta frente a los de Cataluña.