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Un vecino se queja de los ladridos de un perro y la respuesta del dueño desata la polémica

  • Janire Manzanas
  • Graduada en Marketing y experta en Marketing Digital. Redactora en OK Diario. Experta en curiosidades, mascotas, consumo y Lotería de Navidad.

En las comunidades de vecinos, la convivencia puede ser complicada, especialmente cuando surgen problemas relacionados con ruidos. Un claro ejemplo de ello es la situación que ha generado controversia en un edificio, donde un vecino se quejó de los constantes ladridos del perro de su vecino durante un fin de semana. Molesto por el ruido, dejó un mensaje en una zona común del edificio expresando su malestar.

Lo que sorprendió a muchos no fue sólo la queja, sino la respuesta del dueño del perro, quien se amparó en la ley de protección animal para justificar los ladridos, y le pidió que no le dejara más notas. Una usuaria de Threads ha compartido este intercambio de mensajes en la red social, desatando una oleada de comentarios y opiniones. Muchos seguidores se han posicionado en uno u otro lado del debate, con algunos defendiendo al vecino afectado por el ruido y otros apoyando el derecho del dueño a tener su mascota.

Polémica por los ladridos de un perro

En una comunidad de vecinos, la convivencia se puede ver fectada por diversos problemas, como el ruido. Un claro ejemplo de esto es el cartel que un vecino dejó en un zona común, quejándose de los ladridos incesantes de un perro durante todo el fin de semana. «¡Es insoportable! ¡Busca una solución!», decía el mensaje, compartido en redes sociales por Cris en su cuenta de Threads. Sin embargo, lo que más llamó la atención fue la contundente respuesta del dueño del perro. Alegando que su mascota es parte de su unidad familiar según la ley de protección animal, contestó con un tajante «¡Múdate!».

Esta situación ha generado un gran debate entre los seguidores de Cris. Algunos creen que la queja del vecino está más que justificada y sugieren que el dueño del perro debería buscar ayuda profesional para entender por qué su mascota ladra tanto. Otros comprenden la actitud del propietario, señalando que el perro es un miembro más de la familia.

Uno de los comentarios más destacados plantea una analogía: «Si aplicamos la misma lógica, cualquier miembro de una familia podría hacer ruido todo el día y excusarse diciendo que tiene derecho porque es parte del hogar».

 

Publicado por @criissm_18
Ver en Threads

 

Estas son algunas de las respuestas que se pueden leer:

  • «¿Y si hay un recién nacido que no para de llorar? ¿Lo matamos, le ponemos un calcetín en la boca o lo regalamos? Los animales son parte de la unifad familiar y ya no se puede hacer nada en casos así. Lo único es, si ves que hay maltrato, denuncia».
  • «No puedes hacer el ruido que te salga de las narices, ni tu, ni tu perro, ni los hijos, ni nadie, vives en UNA COMUNIDAD, en la que tienes que RESPETAR, y si no sabéis vivir en COMUNIDAD igual quien debería mudarse sois los dueños de los perros que no respetan e iros a vivir en mitad del campo».
  • «Vivo en una comunidad y me pasa absolutamente lo mismo. El perro ladra día y noche. Ella se va y el perro ladra a las seis de la mañana. Llevo veinticinco años viviendo aquí y ella ha llegado hace poco. En los estatutos dicen que se prohíben perros. Entonces, ¿qué debemos hacer? Soy una vecina que respeto el descanso de los demás y hago ruido en horas normales.Lo que más me incomoda es que el perro esté sufriendo».

¿Por qué ladran los perros?

Los perros ladran por diversas razones, siendo ésta su principal vía de comunicación. Una de las causas más habituales es el instinto de alerta o protección, ya que los perros ladran para advertir acerca de la presencia de extraños o situaciones que perciben como peligrosas. Este comportamiento es innato y busca proteger su territorio y a su familia.

Otra razón frecuente es la ansiedad o miedo. Los perros pueden ladrar cuando están nerviosos, estresados o asustados por algún motivo. Esto es común en situaciones de ansiedad por separación o ante ruidos fuertes que los desorientan. Además, el aburrimiento es otro factor que desencadena ladridos excesivos. Si un perro no recibe suficiente ejercicio físico o estimulación mental, puede utilizar los ladridos como una forma de liberar energía acumulada.

Asimismo, algunos perros ladran como una llamada de atención. Si necesitan comida, agua o simplemente compañía, utilizan los ladridos para llamar la atención de sus dueños. Asimismo, los ladridos pueden ser señal de excitabilidad o alegría, especialmente cuando el perro se encuentra con alguien conocido o está emocionado por una actividad, como salir a pasear.

Por último, hay que tener en cuenta que los problemas médicos también pueden estar detrás de ladridos inusuales del perro. Si el animal empieza a ladrar de manera excesiva sin una causa aparente, podría estar sufriendo algún tipo de dolencia, lo que requiere una revisión veterinaria.