Internacional

Pánico en Nueva York por una plaga de abejas en Times Square

Un enjambre de centenares de abejas invadieron el corazón de la ciudad de Nueva York, Times Square, el pasado 9 de junio. Los pequeños insectos sobrevolaron las calles y se posaron en uno de los rascacielos de la zona. La situación ha llegado a tal punto que los servicios de emergencia tuvieron que intervenir para retirarlas y que no ocasionasen daños a la población.

La policía tuvo que acordonar la zona para que los especialistas apicultores del servicio de emergencias pudieran retirarlas. El descontrolado enjambre dejó imágenes curiosas como la de un carrito de perritos calientes con sombrilla con cientos de abejas posadas encima.

La abeja nos pica mediante su aguijón retráctil, ubicado en la parte posterior de su abdomen. Este es áspero: una vez plantado en una epidermis, la abeja ya no puede quitarlo, el aguijón se desgarra con la bolsa de venenoque queda dentro de la piel mientras que la vive apenas unas horas más tras haber picado. Por lo tanto, solo puede picar una vez, a diferencia de los avispones o avispas, cuya picadura es suave y puede picar más de una vez.

Si queremos evitar que las abejas nos piquen, la clave está en no cruzarnos con ellas y aunque la mayoría de las veces el encuentro es casual, debes saber que las abejas no se alejan mucho de su colmena por lo que normalmente, somos nosotros los que «invadimos» sin ser conscientes su espacio.

Así, la abeja no pica por simple agresividad o gratuitamente, sino que en realidad lo que hace es defenderse o proteger su colmena. Por lo tanto, rara vez pica lejos de la colmena, como mucho cuando se encuentra atascada en los pliegues de una prenda o atrapada en el cabello. Lo que tenemos que hacer entonces es liberar a la abeja atrapada del pelo o la ropa para evitar la picadura.