España
Exhumación de Franco

La maldición de ‘Francokamon’ llega al Valle: la mitad de los monjes KO por una extraña intoxicación

La maldición de ‘Francokamon’ alcanza a la Abadía benedictina del Valle de los Caídos. A falta de apenas un día para la exhumación, una ‘misteriosa’ intoxicación alimentaria afecta, al menos, a nueve de los monjes que residen en el monasterio.

Los afectados son la mitad de los monjes que cuidan del monumento donde, de momento, sigue enterrada la momia de Franco. En el monasterio desconocen el origen de esta enfermedad gástrica, que llega en el peor momento: la Abadía está a punto de vivir uno de los días más importantes de su historia con la exhumación de Francisco Franco, prevista para las 10:30 de este jueves.

Los primeros síntomas se manifestaron el lunes. Ese día, tres de los monjes mostraron un cuadro médico de fuertes dolencias gástricas, que incluía episodios de diarrea. El martes, la intoxicación se multiplicó: otros seis monjes empezaron a padecer los mismos síntomas. En total, nueve, la mitad de la veintena de religiosos que residen en el Valle y que se ocupan, entre otras cosas, del Colegio Escolanía Santo Domingo de Silos.

Sea o no resultado de esta tan traída estos días la ‘maldición de Francokamon’, lo cierto es que, según fuentes próximas a la Abadía, la enfermedad también ha dado síntomas de afectar a algunos de los niños de la escolanía.

Esa ‘maldición de Francokamon’, a la que incluso la familia del dictador ha hecho mención recientemente, deseando que la exhumación le pase factura electoral a Pedro Sánchez, saltó a la palestra hace unas semanas.

Su primera ‘víctima’ fue el magistrado del Tribunal Supremo José Luis Requero, uno de los jueces que firmó la sentencia del pasado mes de septiembre que daba la razón al Gobierno en su pleito con los Franco. La decisión judicial que abría la puerta definitivamente a la exhumación.

Pocos días después de rubricar el fallo, el magistrado fue atropellado por un taxi en Madrid cuando circulaba con su moto. El golpe le provocó una fractura en la clavícula del brazo derecho. El mismo con el que firmó la orden de exhumación.

El nombre de ‘Francokamon’ tiene su origen en la archiconocida maldición de la tumba del faraón egipcio Tutankamón. Las creencias populares ligaron muertes repentinas y sucesos extraños relacionados con todos los que participaron en el descubrimiento de la faraónica tumba.