Canarias va camino de doblar el récord de inmigrantes ilegales: de 40.000 en 2023 a 85.000 en 2024

En 2023, Canarias rompió todos los récords de inmigración ilegal llegada a sus costas. El contador se quedó a apenas 90 llegadas de superar la barrera de las 40.000, una cifra nunca antes alcanzada desde que hay registros. Pero 2024 amenaza no solo con superar ese récord, sino con pulverizarlo: con 16.000 llegadas en apenas 4 meses de año, las previsiones del Ministerio del Interior apuntan a que el ejercicio se cerrará con 85.000 entradas de inmigrantes ilegales a las Islas Canarias.

Si se hace la media aritmética del número de inmigrantes ilegales que han entrado en Canarias en los 5 años completos en los que ha gobernado Pedro Sánchez -de 2019 a 2023-, la cifra ronda los 20.000. Las islas, de enero a mayo de 2024, ya han sumado 16.000 en sólo un tercio del año. El año pasado, por estas fechas, había 3.401 llegadas. Cuatro veces menos.

Esas cifras no sólo han alarmado al Gobierno canario, que es quien lidia en primera línea con este fenómeno, sino también al Ministerio del Interior de Fernando Grande-Marlaska.

Desde el Ejecutivo canario de Fernando Clavijo admiten conocer ya las estimaciones que ha realizado el departamento de Grande-Marlaska, que ya tiene sus propias proyecciones de datos en base a las cifras actuales y las tendencias que se esperan en verano y en otoño. Los datos son alarmantes: si las entradas de ilegales se dispararon el pasado año, en este ejercicio están desbocadas y apuntan a alcanzar las 85.000 llegadas de inmigrantes a las costas canarias.

A nivel nacional, la cifra de llegadas en lo que va de año suma ya las 19.887. Triplica, así, a las 6.858 entradas ilegales registradas en los cuatro primeros meses de 2023. No se salvan ni Ceuta y Melilla, a pesar de la visita oficial de Sánchez a Marruecos y los piropos al régimen de Mohamed VI sobre su estrecha y positiva colaboración en materia de inmigración: han llegado un 207% más respecto al pasado año.

Vox advierte

Las previsiones del Ministerio del Interior no han pasado desapercibidas. Desde algunas formaciones políticas, como Vox, se han hecho eco de esas alarmantes cifras y han advertido que «está desembarcando en España una invasión permanente que acaba con la seguridad y los servicios sociales. «Se está haciendo con la colaboración de todos los partidos, excepto Vox», ha señalado el líder de la formación, Santiago Abascal.

Esta política, advierte Abascal, «es consecuencia y la respuesta directa a las regularizaciones masivas de medio millón de inmigrantes ilegales que han votado desde Bildu hasta el PP en el Congreso de los Diputados. Solo Vox habla de ello. Solo Vox propone la solución que ya es un clamor en Europa: deportaciones masivas frente a las inmigraciones ilegales masivas».

Además, Abascal incide en otras medidas que habría que tomar, a su juicio, para atajar el problema: «Persecución de las mafias que trafican con seres humanos y fin de las subvenciones a las oenegés que colaboran con ellas. Todo lo demás es mentir a la población y ponerla en grave peligro».

Sánchez, las peores cifras

Desde que España elabora los registros estadísticos de la inmigración ilegal que consigue entrar cada año en el país, nunca se había alcanzado una cifra semejante a la cosechada por el Gobierno de Pedro Sánchez en 2023, con más de 53.000 entradas. La mayoría por Canarias. De hecho, contando la serie histórica desde 2005, las cifras que se pueden achacar a Sánchez en cinco años y medio en la Moncloa (245.388) superan con creces el número total de entradas que suman casi trece años de gobiernos de José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy (161.400).

El Ministerio del Interior hace balance del año en términos de inmigración ilegal y deja patente que el 2023 ha sido el peor que se recuerda. Al menos desde que en 2005 se empezó a realizar esta estadística: 52.945 entradas de inmigrantes ilegales en total. Por tierra y mar, en Canarias, Baleares, Península o Ceuta y Melilla.