Iryo desmiente al Gobierno sobre el caos en Renfe: «Nuestro tren se detuvo por los problemas de la vía»

Ante las informaciones surgidas a raíz de la incidencia registrada en la línea de Alta Velocidad Madrid–Sevilla el domingo, 4 de mayo, la compañía Iryo ha emitido un comunicado en el que indica que «desea aclarar los hechos relacionados con el tren 6208 con el objetivo de ofrecer la máxima transparencia y rigor técnico».

«El tren Iryo 6208, detenido a la altura de La Sagra en el momento del incidente, ha sido revisado en conjunto con técnicos especialistas del mantenedor Hitachi. El informe técnico resultante concluye de forma clara que tanto el pantógrafo y demás elementos del tren se encuentran en perfecto estado. Esta evaluación acredita que no hay ningún indicio que presuponga cualquier tipo de problema eléctrico ni daño físico originado por el convoy», explica el comunicado.

Desde Iryo inciden en que a las 21:26h el tren se encontraba detenido como consecuencia de una parada técnica motivada por problemas vinculados al robo de cable en los equipos de vía. Durante este tiempo, el tren esperaba instrucciones del CRC (Centro de Regulación de Circulación) de Adif.

Iryo desmiente al Gobierno

Desde Iryo continúan relatando que con el tren ya parado durante 13 minutos, a las 21:39h, el convoy registró la ausencia de tensión, sin ningún tipo de perturbación u otros eventos. El maquinista notificó inmediatamente la incidencia tanto a Adif como a la sala de control de Iryo. Tras recibir autorización del CRC, bajó a la vía y constató visualmente que un tramo de la catenaria (el conjunto de cables suspendidos sobre la vía que proporcionan dicha energía al tren de forma continua y segura) se encontraba sobre el convoy, llegando incluso a tocar el suelo.

Según los datos verificados por Iryo, la caída de la catenaria se produjo por causas completamente ajenas al tren, cayendo sobre el mismo varios metros por delante del pantógrafo (dispositivo situado sobre el techo del tren que permite captar la energía eléctrica de la línea aérea para alimentar el sistema de tracción).

Iryo dispone de registros documentales y material gráfico que acreditan la secuencia de los hechos, y que puede ponerse a disposición para contribuir activamente con la investigación de lo sucedido.

El tren 6208 no requirió ninguna acción correctiva al respecto del incidente descrito y, tras revisarse, quedó disponible para el servicio comercial.

Desde Iryo también se manifiesta una total disposición a colaborar con Adif para esclarecer lo sucedido con el máximo rigor: «Ponemos a su total disposición todos nuestros registros técnicos y documentación de a bordo, como parte de nuestro firme compromiso con la transparencia».

«Queremos agradecer la colaboración de Adif en esta compleja situación, así como reconocer el compromiso de todo el personal de iryo y la comprensión y empatía de nuestros clientes», indica Iryo en el comunicado.