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Economía
Estatuto de los Trabajadores

Golpe confirmado del Estatuto de los Trabajadores: vas a tener que hacer horas extra por ley

Los casos en los que las empresas pueden obligar a los trabajadores a hacer horas extra según el Estatuto de los Trabajadores

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El ritmo laboral, cada vez más exigente, plantea una pregunta que muchos trabajadores se hacen a diario: ¿hasta qué punto pueden obligarme a quedarme más allá de mi jornada? La respuesta, aunque pueda parecer sencilla, está llena de matices legales que conviene conocer para no caer en abusos ni malentendidos. La clave está en el Estatuto de los Trabajadores, que regula nuestros derechos y deberes en el ámbito laboral y que ahora vuelve a estar en el centro del debate.

Durante años, las horas extra han sido motivo de debate. Algunos las hacen sin rechistar, otros las evitan como pueden, y hay quienes ni siquiera saben si están obligados o no a realizarlas. La normativa vigente establece límites claros, pero también deja espacio para ciertas excepciones que pueden cambiar por completo la situación dependiendo del sector, del convenio aplicable o del propio contrato firmado con la empresa. Y es precisamente ahí donde llega el golpe que ya se ha confirmado dentro del Estatuto de los trabajadores: bajo ciertas condiciones, hacer horas extra no sólo puede dejar de ser una opción, sino convertirse en una obligación legal. No se trata de una medida generalizada, pero sí de una posibilidad real que muchos desconocen. Conocer los detalles puede ayudarte a protegerte y, sobre todo, a exigir lo que te corresponde.

Golpe confirmado del Estatuto de los Trabajadores

El Estatuto de los Trabajadores, en su artículo 34, establece que la jornada ordinaria de trabajo no debe superar las cuarenta horas semanales de trabajo efectivo, en promedio anual. Además, la empresa puede distribuir de forma irregular hasta un 10% de esa jornada, lo que significa que algunas semanas podrías trabajar más horas, siempre que se compensen en otras.

Lo que exceda ese límite se considera hora extraordinaria. Es decir, si se sobrepasa ese máximo, ya estamos hablando de trabajo adicional que merece un tratamiento distinto, tanto en lo económico como en lo organizativo. Por tanto, no todo lo que haces de más es automáticamente extra, pero sí debe estar regulado.

¿Son obligatorias las horas extra? 

La gran pregunta es si el empresario puede obligarte a hacer horas extra. La respuesta más directa es: no, salvo que esté pactado. El artículo 35.4 del Estatuto lo deja claro: las horas extraordinarias son voluntarias, salvo que su realización esté contemplada en un convenio colectivo o en el contrato individual de trabajo. Es decir, si firmaste un acuerdo donde se indica que podrías hacerlas, o si tu convenio lo incluye, entonces sí podrían exigírtelas.

Este matiz es fundamental. Muchos trabajadores creen que las horas extra son siempre opcionales, cuando en realidad pueden estar aceptando esa obligación desde el momento en que firman su contrato. Por eso es tan importante leer bien cada cláusula, entender lo que implica y, si es necesario, pedir aclaraciones antes de comprometerse.

Límites que no se pueden rebasar

Aunque se pacte su obligatoriedad, las horas extra tienen un límite legal que no se puede sobrepasar: 80 horas al año. Esta cifra es inamovible, salvo en situaciones de emergencia, como prevenir o reparar siniestros u otros daños extraordinarios y urgentes. En esos casos, el Estatuto permite que se supere ese techo sin que cuente dentro del cómputo anual.

Además, hay que recordar que las horas extraordinarias deben pagarse como mínimo al mismo valor que una hora ordinaria, aunque lo ideal es que se remuneren con un plus. También es posible que se compensen con tiempo de descanso equivalente, algo que debe negociarse y acordarse previamente. La empresa no puede decidirlo de forma unilateral.

Lo que debes revisar

Cada sector tiene sus propias particularidades, y lo que aplica en una empresa o fábrica puede no ser igual en una oficina o en una tienda. Por eso, el primer paso para saber si estás obligado a hacer horas extra es revisar tu convenio colectivo. En muchos casos, este documento ya detalla cuándo pueden exigirse y cómo deben pagarse o compensarse.

El siguiente paso es leer con detenimiento tu contrato individual. Si hay una cláusula que indica que aceptas la realización de horas extra, esa será la base legal que la empresa podría utilizar para reclamarlas. Si no hay nada escrito, entonces siguen siendo voluntarias, y tienes derecho a negarte sin que eso suponga una sanción o represalia.

Las horas extra no son automáticamente un abuso, pero pueden convertirse en ello si no se respetan los límites ni las condiciones legales. El Estatuto de los Trabajadores ofrece un marco de protección bastante claro, pero es responsabilidad de cada trabajador conocerlo y aplicarlo a su situación concreta.

Antes de asumir que tienes que quedarte más allá de tu jornada habitual, pregunta, infórmate y consulta tu convenio y contrato. Así podrás actuar con conocimiento de causa, reclamar lo que te corresponde y, si es necesario, defenderte frente a cualquier abuso. Porque en materia de derechos laborales, la mejor herramienta es siempre la información.