Los aficionados del Borussia Dortmund desplazados a Wembley encendieron numerosas bengalas dentro del estadio durante el descanso de la final de la Champions League contra el Real Madrid. Los hinchas alemanes dejaron en entredicho a la UEFA tras este acto. Antes del encuentro, varios espontáneos saltaron al campo dejando claro que la seguridad no estuvo a la altura.
La UEFA volvió a ser toreada en una final de la Liga de Campeones. Después de ampliar la seguridad en las afueras de Wembley para que no ocurriese ningún incidente como el de la final de París en 2022 o en la de la Eurocopa 2021 en el mismo escenario, dentro, la seguridad de la organización presidida por Ceferin brilló por su ausencia.
En los primeros instantes de partido, varios espontáneos se colaron dentro del terreno de juego durante la final de la Champions League, obligando a detener el encuentro durante varios minutos. La imagen que estaba dando la UEFA al mundo era horrible. Una vez más
Para colmo, durante el descanso, los hinchas del Borussia Dortmund encendieron cientos de bengalas en su fondo, dejando claro que habían logrado pasarlas ante una ausente seguridad de la UEFA. La humareda que quedó en el ambiente de Wembley duró varios minutos durante la final de la Champions League.
La UEFA blindó las afueras de Wembley
La UEFA ha vivido dos malas experiencias recientemente en la organización de finales de sus eventos. El organismo dirigido por Aleksander Ceferin reforzó su dispositivo de seguridad para la final de Champions League que medía a Real Madrid y Borussia Dortmund llenando las calles de policías y seguridad privada.
El rector del fútbol europeo se ha gastado cinco millones de libras adicionales de su partida habitual en este concepto. Vallaron todo el estadio y sus alrededores y la sensación era de seguridad total y absoluta con grupos de policías controlando la circulación de los aficionados. Dentro no lo pareció tanto.
Las escenas que se vivieron en Wembley durante la final de la Eurocopa 2021 con aficionados colándose en el estadio y con evidentes síntomas de ebriedad difícilmente se van a repetir con una UEFA que se ha afanado en blindarlo todo. La organizadora de la Champions League llenó también de cámaras todo el perímetro del estadio y la sensación de control era total y absoluta habiendo abierto las puertas del estadio cuatro horas antes del inicio del partido.
En el recuerdo de todo el mundo están los graves incidentes que se produjeron en París en la final de la Champions de 2022 cuando el duelo entre el Liverpool y el Real Madrid tuvo que empezar más tarde del horario previsto por culpa de la inseguridad, los robos y todo tipo de incidentes que arruinaron la experiencia de muchos aficionados.
La UEFA tomó cartas en el asunto para que en esta final solamente se hable de fútbol y se olvide la otra cara del deporte que desafortunadamente suele aparecer en partidos como éste donde la tensión se corta en el ambiente. De todas maneras, la educación y la convivencia pacífica reinó entre las aficiones de Dortmund y el Real Madrid en las horas previas al encuentro que designará al siguiente campeón de Europa. Lo que no pudo evitar la UEFA fueron las bengalas y los espontáneos, que se volvieron a colar.