El fichaje de Jude Bellingham por el Real Madrid se habría complicado durante la disputa del Mundial de Qatar 2022. A lo largo de la cita, en la que el jugador se encuentra concentrado con Inglaterra y revelándose como uno de los astros del futuro, el Liverpool habría aprovechado para agilizar los contactos con el entorno y el representante del futbolista del Borussia Dortmund. Las conversaciones estarían tan avanzadas, que los agentes del jugador se lo habrían comunicado al club blanco.
El conjunto madridista estaba más que pendiente de lo que sucediera en Qatar de cara a buscar posibles refuerzos. Entre los nombres que tenían en la agenda estaba el de un Bellingham al que siguen desde hace tiempo y que no ha hecho más que confirmarse como el próximo objetivo de los blancos a lo largo del Mundial. Su gran rendimiento con Inglaterra no ofrece dudas, pero en una carrera que parecía liderada por los blancos, parecen haberles tomado la delantera..
El Liverpool ha aprovechado la presencia de varios de sus jugadores en la concentración de los de Southgate para intentar persuadir al jugador. Durante la estancia de la selección inglesa en el emirato, Alexander-Arnold y Henderson le han hecho varios guiños para que acabe recalando en Anfield. Mientras que el primero guarda una estrecha relación con él, puesto que se llaman entre ellos «hermanos», el segundo no dudó en buscarle tras marcar un gol ante Senegal para señalarle como el gran artífice de la jugada.
La táctica empleada por el Liverpool durante el Mundial estaría dando resultado. Puesto que según cuenta Bild, los reds habrían tomado ya la delantera al Real Madrid en las últimas semanas. Mientras que Bellingham explotaba como un jugador top en Qatar, los emisarios ingleses habrían agilizado los contactos con los padres del jugador y con su representante.
Los familiares más directos del futbolista del Dortmund verían mejor la opción de que su hijo regresara a Inglaterra que la de que llegase a España, lo que ha derivado en un avance significativo de las negociaciones entre las partes. Lo único que puede tumbar la operación serían las pretensiones del club alemán, puesto que equipos como el PSG están dispuestos a desembolsar 150 millones de euros por su venta este verano, cifra lejana a la que aspira el Liverpool.
