El regreso del fútbol sigue sin tener fecha y cada vez parece más lejano. Mientras que LaLiga apuesta por volver a la normalidad cuanto antes, los jugadores y varios clubes piden cautela y no se arriesgarán a volver hasta que no se garantice que sea seguro para todos. En esta línea están Real Madrid y Barcelona, que tienen claro que no volverán a jugar hasta que desde Sanidad no dé luz verde al regreso de la competición.
En pleno desconfinamiento progresivo, el deporte sigue sin fecha de vuelta. Mientras que gran parte de la población española puede asistir ya a sus trabajos, las instalaciones deportivas permanecen cerradas. Esta situación está retrasando la vuelta a la rutina de los distintos equipos, por lo que la fecha para disputar lo que queda de Liga sigue sin concretarse.
Tanto el Real Madrid como el Barça se han mostrado desde un primer momento muy cautos respecto a poner en riesgo a su personal. De ahí que aboguen por no regresar hasta que no se den las condiciones necesarias. Ambos conjuntos no quieren que haya riesgo de contagio que obligue a suspender de nuevo la competición y, por ello, no les importa que se prolongue el aplazamiento de la Liga. De hecho, ninguno ha movido un dedo al conocerse la noticia de que los test de la competición no se irían a realizar el 28 de abril.
La propia patronal tenía pensado volver entre el 29 de mayo y el 6 de junio, en un primer momento. Esto sería posible gracias a una minipretemporada previa, después de que los futbolistas de Primera y Segunda se sometiesen a test de detección del COVID-19. Sin embargo, el Gobierno ha impedido que la idea de Tebas se lleve a cabo, lo que sumado a la negativa de los futbolistas a jugar, ha vuelto a dejar en el aire el regreso de la competición.
El Real Madrid mostró desde un primer momento que primaba la salud de los jugadores, cuerpo técnico y demás personal que trabaja para el club por encima de cualquier cosa. Prueba de ello fue la cuarentena inmediata decretada por el club y el cierre de Valdebebas tras el positivo de Trey Thompkins.
En este caso, tanto los blancos como el Barça van de la mano. La plantilla culé se muestra contraria a la idea de volver a los entrenamientos hasta que no se les garanticen al cien por cien medidas de prevención y un bajo riesgo de contagio. Una idea respaldada en todo momento por la directiva, pese a que la falta de liquidez puede suponer un grave problema para la entidad si no se retoma la actividad.
La Liga se arriesga a perder cerca 700 millones si la temporada se da por finalizada, de ahí las prisas de Tebas porque todo vuelva a la normalidad cuanto antes. Aún sabiendo lo que hay en juego y que se trata de una industria de gran importancia para la economía del país, varios de los equipos de las principales categorías de nuestro fútbol, liderados por los dos grandes, tienen las cosas claras. Hasta que Sanidad no diga que es seguro volver, no lo harán.
