El Real Madrid sigue lanzado en Liga y volvió a sumar de tres en el Di Stéfano. Las madridistas se impusieron al Athletic por 2-1 gracias a los goles de Esther y de Feller. En un partido cómodo durante gran parte de los minutos para las blancas, les faltó contundencia en el área rival para cerrar el partido y estuvieron a punto de pagarlo. Un gol de Amezaga permitió a las rojiblancas mantenerse con opciones hasta el final, teniendo oportunidades para igualar el marcador, aunque los puntos se quedaron finalmente en Valdebebas.
Sufrieron, pero se llevaron un triunfo que permite a las de Toril seguir con paso firme en la Liga F, donde suman su octava victoria consecutiva. Tras la derrota en el Clásico de la jornada 8, las blancas no han parado de ganar en el campeonato. Aún tienen dos partidos pendientes y, pese a ello, han abierto ya una brecha de 11 puntos con la cuarta posición, que la ocupa el Atlético de Madrid.
El técnico volvió a darle una vuelta al equipo después del partido del miércoles ante el Alavés. Optó de nuevo por un 3-5-2 ya habitual en el que Rocío, Kathellen e Ivana formaban en la zaga. Los cambios estaban en el centro del campo, con las entradas de Zornoza y Toletti en el doble pivote y de Svava en el carril zurdo. Athenea, Weir y Esther volvían a aparecer como referencias arriba, acompañadas esta vez por Feller.
Dominó el Madrid con claridad en los primeros minutos, buscando sin éxito abrir el marcador. Lo pudo hacer Zornoza con un disparo lejano que se marchó por poco. Pero también el Athletic, tras un centro que el fuerte viento de Valdebebas envenenó y obligó a reaccionar a Misa. Fue lo poco destacable del conjunto bilbaíno, que cuando se acercaba la media hora de partido, se llevó el primero.
Weir hizo un par de filigranas en el área antes de dejarle el balón a Toletti, que la pegó con toda la intención desde el punto de penalti. Rechazó Quiñones, dejándole el balón muerto a Esther, que no desaprovechó. La delantera granadina hizo su duodécimo gol en esta Liga y el decimoséptimo teniendo en cuenta el resto de competiciones este curso.
Tras el gol, aumentó el dominio hasta convertirse el partido en un auténtico monólogo madridista. Las blancas presionaban a un Athletic incapaz y llegaban con una facilidad increíble, aunque les costaba mucho generar ocasiones claras para cerrar el partido. No fue hasta la segunda parte cuando Feller parecía allanar el camino de las blancas al aprovechar un pase en profundidad perfecto de Weir.
Sin embargo, el Athletic reaccionó al momento. En la siguiente jugada, Jone Amezaga penetraba en el área desde el pico izquierdo, se marchaba de Ivana y de Kathellen y su disparo, tras tocar en la brasileña, entraba mansamente en la portería de Misa, que no pudo hacer nada tras el rebote.
El tanto dio alas a un equipo rojiblanco que hasta ese momento apenas había hecho acto de presencia en el partido. Las blancas acabaron pagando su falta de contundencia sobre la portería de Quiñones y sufrieron más de lo esperado para asegurarse el triunfo. Y es que las bilbaínas tuvieron ocasiones para empatar el partido, aunque les faltó también efectividad para lograr remontar el encuentro.