En el Real Madrid ha sorprendido y no ha terminado de gustar que la UEFA apueste por finalizar la presente edición de la Youth League. Al club le ha pillado esta decisión en pleno proceso de reconstrucción de la cantera, con los jugadores que tendrán que afrontar este torneo en sus respectivos hogares desde la segunda semana de marzo y sin entrenador del Juvenil A, ya que Dani Poyatos no continuará y se convertirá en las próximas semanas en nuevo técnico del Panathinaikos. El entrenador catalán deja atrás una excelente labor formativa, pero no ha podido dejar pasar la oportunidad de saltar a la élite y desde el club lo han entendido perfectamente. A pesar de esto, sin duda es un momento complicado como para tener que afrontar una competición de prestigio que por Valdebebas se daba como finalizada cuando el coronavirus lo paró todo. Y ahí la figura de Raúl entra en escena.
Ya gustó poco que la UEFA apurase hasta el límite las opciones de que el partido perteneciente a los octavos de final de la ‘Champions Juvenil’ que enfrentaba a Juventus y Real Madrid en Turín cuando el coronavirus comenzaba a golpear con extrema dureza a Italia se disputase. Finalmente, y tras enfadar a la institución blanca, el organismo continental decidió aplazar una semana dicho encuentro para, finalmente, suspenderlo. Una decisión que desde el club se cree que se tendría que haber tomado desde el primer momento.
Pero ahora, cuando ya nadie pensaba en la Youth League, el Comité de la UEFA ha decidido que este torneo se juegue en el mes de agosto. En concreto, el Real Madrid jugaría el duelo ante la Juventus el día 16. En caso de vencer, el filial madridista se medirá al ganador del cruce entre el Inter de Milán y el Rennes en los cuartos de final el 18 o 19 de agosto, mientras que unas hipotéticas semifinales se celebrarían el 22 y la gran final el 25. Todos los partidos se disputarán en Nyon. Y el club se ve obligado a buscar, en primer lugar, un entrenador.
Manu Fernández, nuevo director de fútbol, tendrá que decidir si ficha ya a un entrenador para el Juvenil A que se haga cargo del equipo en la Youth League, a pesar de que los jugadores que tendría la próxima temporada no serían en su mayoría los que jugarían este torneo, o apuestan por un entrenador de la casa y, sin técnico en los dos primeros juveniles, Raúl es una opción muy a tener en cuenta con Alberto Garrido, segundo de Poyatos, como ayudante. El entrenador del Castilla es el que mejor conoce a un grupo de jugadores que ascenderá el próximo año al primer filial madridista. De hecho, alguno como Miguel Baeza, ha estado esta temporada a las órdenes del ‘7’, lo seguirá estando el año que viene y puede reforzar al Juvenil A.
Otra posibilidad es apostar por un entrenador con experiencia como Tristán Celador, que ha estado esta temporada al mando del Cadete A. Lo que es seguro es que en las próximas semanas se tendrá que tomar una decisión, al igual que se tendrá que empezar a reclutar a los jugadores, que tampoco será sencillo, ya que alguno daba por finalizada su aventura en el Real Madrid y otros saldrían cedidos, por lo que el club deberá acometer esta problemática para poder confeccionar una plantilla de garantías.
Los técnicos ya trabajan en la vuelta
Lo que ya están preparando los preparadores físicos es la vuelta al trabajo. El Real Madrid quiere tener algo más de un mes para poder preparar la vuelta a la competición con la seguridad de que los futbolistas llegan en plena forma y no sufran lesiones musculares.
Los blancos jugaron su último partido el 7 de marzo ante el Badajoz. Después, se aplazó el duelo de la Youth League, para terminar suspendiéndolo. Como todo sucedió antes de que el Gobierno decretase el estado de alarma en el país, los futbolistas se pudieron ir a sus respectivos domicilios.
