Después de 19 victorias consecutivas, el Real Madrid vio frenada su espectacular racha de invicto al perder ante un gran Unicaja Málaga (93-99) comandado por David Kravish (23 puntos). Los blancos, que llegaron a ponerse 21 arriba, fueron arrasados por una espectacular segunda parte de los andaluces, que derribaron la fortaleza del WiZink Center y una cadena de resultados para la historia de la Liga Endesa.
El choque rompió a bonito en sus primeros compases y la anotación fue realmente alta, así como la igualdad. El Madrid no consiguió distanciarse de Unicaja hasta bien entrado el segundo cuarto y se marchó ganando de 15 al descanso (54-39). Esta vez los encargados de decantar la balanza fueron Mario Hezonja, Facundo Campazzo, Gaby Deck, Chacho Rodríguez y Rudy Fernández.
La intensidad cayó en picado en el inicio de la segunda mitad, donde hubo turno para los Walter Tavares y Alberto Abalde. Unicaja se acercó peligrosamente gracias a su mayor baza, la de Kameron Taylor, pero la presencia del pívot caboverdiano del Madrid aguó muchas de las opciones de los pupilos de Ibon Navarro.
Un triple a 2:17 del final del tercer cuarto obligó a Chus Mateo a pedir tiempo muerto porque su rival se ponía a siete puntos. El penúltimo acto se agitaba en sus segundos finales y a este le acompañaron uno de Tyler Kalinoski y otro de Hezonja, que cumplía 100 partidos con la camiseta blanca. El recital de triples seguía y Kravish empataba con el croata y con Taylor como máximo anotador.
Remontada de Unicaja al Madrid
La batalla llegaba a su último envite, donde primero y cuarto de la Liga Endesa se jugaban un triunfo muy importante. La distancia entre uno y otro era de seis puntos, los que debían guardar los de Chus Mateo para prolongar su impresionante racha de victorias. Un nuevo triple de Kalinoski, la aparición estelar de Unicaja en la segunda mitad, ponía a tres a los de Ibon Navarro.
Kravish se puso líder en solitario en la faceta anotadora, colocando a los suyos a dos puntos del Madrid, pero una obra de arte del Chacho seguido de un robo bestial entre Vincent Poirier y Rudy contuvieron la racha malagueña. Kalinoski entró, acercó y consiguió el empate provisional (81-81) a cinco minutos del final. Los dos estadounidenses revolucionaron el partido y pusieron en apuros al invicto en su fortín.
Tavares al rescate para parar a un Kravish enorme, que puso a Unicaja dos arriba a tres minutos del bocinazo final. La distancia era aún mayor a menos de dos minutos, pero Campazzo forzó una falta vital para los locales y sus dos tiros acabaron entrando a canasta. Taylor sentenció con una cabalgada tremenda hacia el aro en la que, además de anotar, generó una oportunidad más desde el tiro libre.
Unicaja mató el partido en el último minuto y acabó con una racha de 19 victorias, remontando un partido que se les puso muy cuesta arriba, ya que llegaron a ir perdiendo de 21 puntos. Así, se consumaba la primera derrota de los blancos esta temporada, pero el liderato del campeonato doméstico sigue intacto para ellos.