El Real Madrid se la juega en un doble compromiso europeo que marcará la práctica totalidad de sus opciones de acceder a los cuartos de final de la Euroliga. El conjunto merengue recibirá, en sesión duplicada de martes y viernes, a Anadolu Efes y Olympiacos, dos de los clásicos de la competición, en condiciones contrapuestas y a los que deberá superar para asegurarse una plaza en el Top 8 de la máxima competición continental.
Después de estos dos encuentros, el Madrid sólo tendrá por delante el duelo de cierre de la fase regular, el próximo jueves ante un Fenerbahce que si bien no ha sellado su pase de forma matemática, está en clara línea ascendente y es uno de los candidatos a hacerse con el título. En casa, con un rival de peso –Efes– y otro teóricamente un escalón por debajo –Olympiacos–, el objetivo es un pleno que confirmaría o dejaría muy cerca el pase.
Pablo Laso confía en que su equipo pueda acceder a los cuartos de final de la Euroliga, ronda en la que se han convertido en fijos por sus resultados de la última década, y a partir de ahí, esperar rival al que sobrepasar con el factor campo en contra. El técnico madridista celebró que su equipo dependa de sí mismo en estos momentos.
«Cuando quedan tres partidos, en la situación en la que estamos nosotros siempre digo que debemos depender de nosotros mismos. Hay que ganar los tres pero solo me preocupa el de mañana. No puedo pensar más adelante. El equipo ha conseguido un número de victorias alto en Europa, pero la clasificación está muy apretada. No me puedo centrar en lo que viene después», afirmó Laso en la rueda de prensa previa al encuentro frente al Efes.
Anadolu Efes, precisamente, es el principal hueso de la semana para el Real Madrid. Virtualmente clasificado para cuartos, la pareja Larkin-Micic amenaza al equipo blanco con ganas de revancha, después de la brillante victoria madridista en el choque de ida en Estambul. Efes es, sin lugar a dudas, uno de los grandes candidatos al título, un hueso ante el que el Madrid deberá sacar una versión superior a la mostrada ante Barcelona o CSKA, donde el resultado acabó siendo negativo.
Rudy vuelve justo a tiempo
La principal noticia en el último día antes del comienzo de la tormenta de partidos fue el regreso de Rudy Fernández a los entrenamientos grupales, que no pisaba desde febrero debido a una lesión en la espalda que le apartó de la dinámica del primer equipo. El alero vuelve justo a tiempo para ayudar a sus compañeros en un tramo de campaña en el que se necesita más que nunca la experiencia y la sobresaliente capacidad competitiva del ‘5’ del Real Madrid.
Laso, pese a poder disfrutar de Rudy en el entrenamiento, fue prudente en su análisis. «Rudy es el primer día que ha entrenado, veremos cómo está mañana. El resto ha entrenado bien, hay algún golpe pero son situaciones normales a estas alturas de la temporada». La primera idea del cuerpo técnico es que Fernández esté junto al equipo en las convocatorias de esta semana, incluida la del partido ante Efes, pero no se asegura su presencia en la cancha.
Los rivales por el Top 8
La clasificación de la Euroliga, a falta de tres jornadas por disputarse, se encuentra más apretada que nunca, con sólo dos victorias de diferencia entre el cuarto clasificado y el décimo. Así las cosas, cualquier resultado puede alterar las previsiones actuales, que dejan a Armani Milán, Fenerbahce y Bayern, con 19 victorias, como principales candidatos, junto con el Real Madrid, con 18, y Zenit, que marca el límite, Baskonia y Valencia como outsiders y pujantes por la última posición de acceso a cuartos.
El Madrid no puede confiarse, pero dos triunfos suyos como local esta semana le darían el pase virtual a cuartos, e incluso opciones de ascender posiciones. La lucha por tener el factor cancha a favor está harto complicada para los blancos, pero un rush final positivo puede hacer que el Real, en su papel de tapado, sume puntos para un hipotético acceso a la Final Four.
