Deportes
Ha presentado su renuncia por carta

Rubiales anuncia su dimisión como presidente de la Federación

Luis Rubiales ha dimitido como presidente de la Real Federación Española de Fútbol. El dirigente, que estaba suspendido por la FIFA, decide dar un paso al lado después de la polémica surgida tras el beso a Jenni Hermoso en la final del Mundial femenino del pasado 20 de agosto. Después de ser apartado y sustituido por Pedro Rocha al frente de la institución y de la denuncia de la jugadora ante la Fiscalía, ha anunciado su renuncia.

La jugadora de la selección dijo que no fue consentido y presentó el pasado martes una denuncia ante la Fiscalía, por un posible delito de agresión sexual. Antes, tras la Asamblea General Extraordinaria celebrada el pasado 25 de agosto, en la que se negó a dimitir, la FIFA le había expedientado y suspendido de manera cautelar, por un plazo de 90 días.

Desde entonces, el Gobierno trató de inhabilitarle a través del Consejo Superior de Deportes, pero el TAD consideró que lo sucedido en Sídney eran dos actos graves y no muy graves, por lo que el Ejecutivo no tenía forma de hacerlo. Aún así, desde el CSD lo han intentado por todos los medios. El último fue un intento de suspensión cautelar ante el TAD al considerar que «daña la imagen de España».

Además de dejar su cargo como presidente de la RFEF, Rubiales ha dimitido como vicepresidente de la UEFA. En una carta enviada al presidente interino, Pedro Rocha, ha señalado que «es evidente que no podré volver a mi cargo». «Insistir en quedarme a la espera y aferrarme a ello no va a contribuir a nada positivo, ni a la Federación, ni al fútbol español. Entre otras cosas, porque hay poderes fácticos que impedirán mi vuelta», ha destacado.

Carta de Rubiales

«Buenas noches.

Hoy he transmitido a las 21:30 hrs al Presidente en funciones, D. Pedro Rocha, mi renuncia al cargo de Presidente de la RFEF. También le he informado de que he hecho lo mismo con mi cargo en UEFA para que mi puesto en la Vicepresidencia pueda ser sustituido.

Tras la veloz suspensión realizada por FIFA, más el resto de procedimientos abiertos contra mi persona, es evidente que no podré volver a mi cargo. Insistir en quedarme a la espera y aferrarme a ello no va a contribuir a nada positivo, ni a la Federación ni al fútbol español. Entre otras cosas, porque hay poderes fácticos que impedirán mi vuelta.

Ahí está la gestión de mi equipo y, sobre todo, la felicidad que me llevo por el enorme privilegio de estos más de 5 años al frente de la RFEF. No quiero que el fútbol español pueda resultar perjudicado por toda esta campaña tan desproporcionada y, sobre todo, tomo esta decisión tras haberme asegurado de que mi marcha contribuirá a la estabilidad que va a permitir que tanto Europa como África sigan unidas en el sueño de 2030, que permitirá traer a nuestro país el mayor evento del mundo.

Debo mirar adelante, mirar al futuro. Ahora hay algo que me ocupa con firmeza. Tengo fe en la verdad y voy a hacer todo cuanto esté en mi mano para que prevalezca. Mis hijas, mi familia y la gente que me quiere han sufrido los efectos de una persecución desmedida, así como muchas falsedades, pero también es cierto que en la calle, cada día más, la verdad se está imponiendo.

Desde aquí transmito a todos los trabajadores, asambleístas, federativos y gente del fútbol en general, un fuerte abrazo, deseándoles mucha suerte.

Gracias a todos los que me han apoyado en estos momentos.

Luis Manuel Rubiales Béjar».