Neymar quiere brasileizar al Barça: ahora apunta a Paulinho
La liga china irrumpió con fuerza la pasada campaña cuando comenzó a fichar estrellas del panorama futbolístico europeo a golpe de talonario. Jugadores como Jackson Martínez, Hulk u Oscar, abandonaban sus respectivos clubes, cautivados por los cantos de sirena del fútbol del gigante asiático. El campeonato intentaba subir su bajo nivel asegurando a los jugadores un placentero retiro que incrementara considerablemente sus cuentas bancarias.
Sin embargo -y sorprendentemente- hay un club tratando de pescar en China. Se trata del FC Barcelona. Los blaugranas estarían interesados en reforzarse de cara a la próxima temporada con Paulinho. El mediocentro del Guangzhou Evergrande sería objetivo del conjunto culé, por el que pedirían 40 millones de euros. El club chino se remite a la cláusula de rescisión del jugador, amigo de Neymar y de Lucas Lima, otro de los brasileños tras los que andan en Can Barça.
Paulinho es prácticamente un desconocido en el viejo continente, donde probó fortuna en dos ocasiones. Primero, en Lituania y Polonia durante dos años y, tras volver a Brasil, estuvo dos temporadas en el Tottenham, hasta que puso rumbo al fútbol chino en 2015.
Pese a estar alejado de la gran competición desde hace dos temporadas, el brasileño se ha convertido en un fijo para Tite en el resurgir de Brasil. Tras los batacazos en el último campeonato del mundo y en las dos últimas ediciones Copa de América, la canarinha ha recuperado la forma y, con Neymar como líder, se está erigiendo como uno de los candidatos a hacerse con el cetro mundial en Rusia el próximo verano.
Precisamente, su amistad con el delantero blaugrana sería la principal baza de la entidad catalana para que Paulinho desembarque en la Ciudad Condal. Sin embargo, no será una operación fácil. El propio Scolari, técnico del Guangzhou, ha confirmado que desde el propio club no se plantean un traspaso por debajo de la cláusula, que es de 40 millones.
El ex seleccionador brasileño fue tajante sobre la posibilidad de rebajar el precio de salida del jugador. «Ningún club chino dejará ir a sus jugadores clave porque sería difícil encontrar a un sustituto debido a las normas que se han implementado en la Liga», sentenció.