Messi se va destrozado y entre lágrimas: «Yo sí hice todo lo posible por quedarme»

• Miguel Serrano @latigoserrano
• Me confundieron con un joven prodigio pero acabé de periodista. Escribo cosas de deportes y del Real Madrid en OKDIARIO, igual que antes las escribía en Marca. También a veces hablo por la radio y casi siempre sin decir palabrotas. Soy bastante tocapelotas. Perdonen las molestias.
• • 08/08/2021 12:53
  • Actualizado: 08/08/2021 19:07

Leo Messi se despidió del Barcelona destrozado y entre lágrimas. Entró llorando y le costó tomar la palabra. Rodeado de su familia, sus compañeros, Koeman y Laporta, el crack argentino explicó los motivos de su salida del club azulgrana y dejó un mensaje claro y rotundo: «Yo sí hice todo lo posible por quedarme».

Entró llorando. Messi se plantó ante el micrófono, se quitó la mascarilla y brotaron todas las lágrimas del mundo. Se giró rápido, como cuando regatea en el campo, para ponerse de espaldas y seguir llorando a moco tendido. Leo sacó un pañuelo de la americana para cubrirse el rostro. Se había derrumbado antes de empezar. Demasiadas emociones, demasiados recuerdos, demasiado dolor.

El auditorio, con familiares, directivos, compañeros y leyendas del Barcelona, estalló en un aplauso de alivio para Messi. Leo trató de recomponer la figura y se sinceró, aún con los ojos llorosos: «No sé si voy a poder hablar». Pudo. Pero le costó la misma vida. Se le veía destrozado en un intento de explicar lo inexplicable: el adiós al club de su vida.

«En estos últimos días pensé qué podía decir», arrancó entrecortado Messi. «La verdad que no me salía nada, estaba bloqueado. Lo estoy todavía. Es muy difícil después de tantos años, de hacer toda mi vida acá, no estaba preparado. El año pasado, cuando se armó el lío del burofax sí estaba convencido, pero este año, no. Estaba convencido de que íbamos a seguir en nuestra casa, era lo que más queríamos».

La promesa de volver

Messi paró un segundo, tomó aire y prosiguió con su discurso de despedida del Barcelona: «Hoy me toca despedirme de esto. Fueron muchos años. Llegué muy chiquito. Después de 21 años, me voy con mi mujer, con tres catalanes argentinos… No puedo estar más orgulloso de todo lo que hice y viví en esta ciudad. Después de estar unos años fuera vamos a volver. Así se lo prometí a mis hijos. Me queda agradecer a todos todo lo vivido. Crecí con los valores de este club y siempre intenté manejarme con humildad».

Cuando Leo Messi terminó su discurso de despedida, breve, sentido, desgarrador, todos los presentes rompieron en una ovación interminable, de más de un minuto, menos de la que se merecía el jugador que tantas veces ha dejado boquiabierto al mundo con una pelota siempre cosida al pie. Leo siguió llorando hasta que el presentador salió al quite y dio paso al turno de preguntas. Y Messi ofreció todas las explicaciones.

La primera, el motivo de su adiós al Barcelona cuando el acuerdo para su continuidad estaba cerrado. Messi fue directo y tajante: «Laporta me dijo que estaba todo arreglado pero en el último momento, por el tema de la Liga, no se pudo hacer». Además, Leo dejó un mensaje para que el aficionado culé entienda quién ha tenido la culpa de su salida del club: «Tengo claro que yo sí hice todo lo posible por seguir. El club y Laporta dijeron que no se pudo por un tema de la Liga, pero te puedo asegurar que yo hice todo lo posible por quedarme, porque quería quedarme, no como el año pasado, pero no se pudo. Llegué a un acuerdo para bajarme el 50 por ciento la ficha, pero al final no se pudo».

Su fichaje por el PSG

No quiso Messi dar pistas sobre que siempre le quedará París, la siguiente estación de su impresionante carrera. «El PSG es una posibilidad, pero a estas alturas no tengo nada arreglado con nadie. Se interesaron varios clubes, pero sí que estamos hablando con el PSG, obviamente», dijo.

Negó el crack argentino que en su negociación con el Barcelona se dieran falsas esperanzas a los aficionados azulgranas sobre su continuidad en el Camp Nou. «No, falsas esperanzas, no», dijo Messi. «Estábamos seguros de que seguiría en el Barça. Tan claro era que teníamos todo arreglado y sin problemas. Creo que siempre fui sincero con la gente. De mi parte nunca engañé a la gente».

Messi fue brutalmente sincero al asegurar que estaba pasando el peor trago de su vida en el Barcelona con su despedida tras 21 años: «En mi carrera he tenido muchos momentos duros, pero este es el más difícil, este es el final en este club y esto ya no vuelve, así que es el momento más difícil de mi vida en el Barcelona. «Siento tristeza por irme del club al que amo y en un momento que no me esperaba, porque siempre fui de frente diciendo la verdad: no quería irme. Por eso tengo esa tristeza», señaló.

Su momento más duro en el Barça

Leo volvió a explicar su adiós al Barcelona sin regates. «Yo lo único que sé es que no se pudo por la Liga, por la deuda del club, porque el club no quería endeudarse más. No tengo nada que decir a Tebas, me lo he cruzado un par de veces en mi vida y no tengo nada que decirle porque no tengo ningún problema con él», insistió Messi.

El argentino, emocionado y dolido, explicó que su salida ha sido «un baldazo de agua fría. Estamos asimilándolo como podemos. Cuando me vaya me va a caer más las fichas todavía. Va a ser peor todavía. Vamos a estar arropados de mi familia y de mis seres queridos. Voy a seguir jugando y una vez que empiece se me pasará un poco todo esto».

El Barcelona después de Messi

Messi también se refirió a qué será del Barcelona cuando él se vaya: «El Barça tiene una grandísima plantilla y los jugadores pasan. Como dijo Laporta, el club es mas importante que cualquiera y la gente se va a acostumbrar a ver al Barça sin mí, como pasa con todo. Al principio será raro, pero hay una gran plantilla y al final todo se acomoda».

Por último, admitió que la Champions es la espinita clavada de su gloriosa etapa en el Barcelona. «Me queda la espinita de haber conseguido otra Champions más. Tuvimos una generación para haber conseguido alguna Champions más, pero esto es el fútbol. Tengo la espinita de la Champions y espero sacármela en mi próximo club», concluyó Messi.

Leo no estuvo solo en su adiós. Le acompañó toda su familia y le acompañaron también sus 35 títulos con el Barcelona. No faltó el presidente, Joan Laporta, ni su entrenador, Ronald Koeman, ni algunos de sus mejores compañeros de viaje como Piqué, Puyol y Xavi Hernández. Messi no se merecía menos.

El legado de Messi

El crack argentino se marcha del Barcelona con una inacabable lista de récords individuales, tres de ellos serán muy difíciles de superar: el de jugador con más partidos jugados (774), el de más goles marcados (670) y el de más títulos conseguidos (35).

Messi deja el Barcelona después de 18 años en el primer equipo. Su sombra, más que alargada, será eterna. El hueco de su salida supondrá un socavón sobre el césped del Camp Nou que nadie podrá rellenar. Se va el mejor, el hombre que cambió la historia del Barça y que le puso en un lugar que jamás había estado y quién sabe si volverá a estar.