Deportes

Luis Enrique le pide a Arda que espabile o traerá a Krohn-Dehli

  • Francisco Rabadán
  • Redactor jefe de deportes. He tenido la oportunidad de cubrir dos Juegos Olímpicos, varios Mundiales de distintas disciplinas y algún que otro All-Star de la NBA con los Gasol. De Córdoba y sin acento.

El Barcelona presiona a Arda Turan para que mejore su rendimiento. El turco, que venía con la vitola de estrella del Atlético de Madrid, ha sido incapaz alcanzar el nivel esperado por su técnico Luis Enrique. El asturiano está decepcionado con el jugador hasta tal punto que piensa en traspasarle.

Los culés desembolsaron por Arda 35 millones de euros el pasado verano. El equipo espera poder venderle por una cifra similar –incluso aceptarían una inferior– si no da un cambio de imagen radical de aquí al final de la temporada. Las próximas renovaciones de Neymar y de Messi hacen que el Barcelona cuide al máximo en quién invierte su dinero para cumplir con sus estatutos de endeudamiento y con el fair play financiero.

Arda se sitúa en el mismo escalafón salarial que Jordi Alba e Ivan Rakitic alcanzando los ocho millones de euros brutos de ficha. El turco no es titular, a diferencia de sus compañeros de jerarquía económica, y sus números no le dejan muy bien parado: dos goles y ocho tarjetas amarillas en 1.124 minutos de juego.

Luis Enrique tiene un sustituto para Arda

Luis Enrique está sometido a una gran presión por parte de una directiva que quiere desprenderse de un jugador que era una petición expresa del técnico. El nombre que más gusta a Lucho es un viejo conocido como Michael Krohn-Dehli. El danés coincidió con el asturiano en las filas del Celta de Vigo en 2013 y desde entonces ambos han prosperado en sus carreras.

Krohn-Dehli se ha convertido en un pilar esencial del sistema de Unai Emery en el Sevilla. El jugador cumple a la perfección con los requisitos que busca la directiva culé. Su traspaso se cerraría como máximo en 10 millones y su ficha difícilmente superará los tres millones. Un fichaje de perfil bajo para tapar muchos huecos tipo Mathieu.

El único lunar que tiene el danés es su edad. A sus 32 años, quizá su mejor momento haya pasado. Sin embargo, su polivalencia –puede jugar de ancla o de volante– y su capacidad de trabajo gustan mucho a Luis Enrique. Arda, sin ir más lejos, quedó sorprendido a su llegada al Barcelona por la dura exigencia de los entrenamientos del equipo hasta el punto de que afirmó que «eran más duros que los del Atlético». Luis Enrique conoce a la perfección a Krohn-Dehli y cómo se las gasta el asturiano. «El fútbol que practica el Barcelona es una delicia», aseguró el danés el año pasado.