Inglaterra dimite del gol y pasa como segunda (0-0)

El partido comenzó con seis caras nuevas en el once inicial de Inglaterra con respecto al duelo ante Gales. La grandes novedades fueron Jamie Vardy y Jack Wilshere. Hodgson optó por sentar a Kane y Rooney y dar entrada al delantero del Leicester, que ya anotó frente al conjunto de Bale, junto al centrocampista del Arsenal. También Sturridge, el héroe del triunfo contra Gales, empezó de inicio.

Pese a las rotaciones, la idea de Inglaterra era clara: ganar para pasar como primeros. Roy Hodgson apostó por un once bastante ofensivo en busca de ese objetivo. Empezaron apretando, metiendo a Eslovaquia en su área y creando mucho peligro. Vardy y Lallana dispusieron de las mejores oportunidades en la primera mitad. Pero el guardameta estuvo atento y detuvo ambos lanzamientos. Primero un mano a mano con el del Leicester y después un disparo desde la frontal del futbolista del Liverpool.

Los ingleses se volcaron al ataque en los últimos minutos. Eslovaquia no salía de su área. Llegaban pero no materializaban las jugadas. Les faltaba lo más importante, rematar la jugada. Daba la sensación de estar reviviendo el partido ante Rusia, donde Inglaterra dominó, dispuso de numerosas ocasiones pero no culminó y lo acabó pagando. Al descanso, el resultado era el mismo (0-0).

En la reanudación, el choque comenzó de manera fulgurante. Primero fue Eslovaquia quien metió miedo, gracias a un error de Smalling. Cedió con el pecho a Hart, se queda corto, y a punto está de aprovecharlo Mak para adelantar a los eslovacos. Los aficionados tenían el corazón en un puño con ese susto, a punto estuvo de darles un infarto. Acto seguido, Clyne falló el 0-1.

Rooney y Alli mejoraron a Inglaterra

A Hodgson no le gustaba nada como había comenzado la segunda mitad y sacó a Rooney y Dele Alli para volver a tener el control del partido. Nada más entrar en el terreno de juego, el futbolista del Tottenham pudo perforar la meta de Kozácic pero Skrtel salvó bajo palos in extremis. A partir de ahí se animó Inglaterra.

Entre Rooney y Dele Alli cambiaron la cara al partido y lideraron el ataque de su selección. Apretaban con uñas y dientes en busca de esa asignatura pendiente que tanto les estaba costando durante todo el encuentro, el gol. Por eso Hodgson puso toda la artillería pesada sobre el campo con la entrada de Harry Kane.

El guión era el mismo que el del final de la primera mitad. Inglaterra atacaba y Eslovaquia defendía con los 11 dentro de su área. Era un asedio total a la portería de Kozácic. Cada ataque terminaba en córner o despeje de Skrtel. En los últimos minutos comenzaron a colgar balones al área a la desesperada. Necesitaban un tanto para ser primeros de grupo, tras la victoria de Gales frente a Rusia. Pero nunca llegó y pasan a octavos como segundos de grupo, con cinco puntos. Los eslovacos deben esperar para ver si se meten como terceros.