La fe del Geta tumba al Barcelona

El Barcelona cayó derrotado frente al Getafe por 1-0 en el Coliseum Alfonso Pérez en un partido en el que los de Ronald Koeman no ofrecieron su mejor versión. Sólo durante un tramo de media hora el cuadro azulgrana se mostró fluido, pero no fueron capaces de materializar sus ocasiones. Un penalti de Frenkie de Jong a Djené permitió a Jaime Mata batir a Neto y hacer subir el único gol del choque en el marcador. 

Los azulgranas calentaban sabiendo que a unos pocos kilómetros el Real Madrid había caído ante el Cádiz en el Alfredo di Stéfano. Los culés eran conscientes de que una victoria en el Coliseum les empataría a puntos a los merengues aun teniendo un partido menos y con el Clásico a la vuelta de la esquina. También eran conocedores que tal vez Sergio Ramos no llegase al encuentro tras haberse lesionado frente al conjunto gaditano.

Con eso en la cabeza, los once elegidos por Ronald Koeman tenían una gran responsabilidad. Neto salía en portería, con Sergi Roberto en la banda derecha y Dest en el carril opuesto. Piqué y Lenglet en el eje de la zaga y Frenkie de Jong y Sergio Busquets en el mediocentro. Por delante destacaba la suplencia de Ansu Fati y Coutinho y la titularidad de Pedri y Dembélé. El once lo completaba el insustituible Leo Messi y Antoine Griezmann, que ha tenido un roce dialéctico en estos días con el técnico holandés. La pelota volvía a estar en el tejado del de Macon.

El balón rodaba en el Coliseum y era el Getafe el que comenzaba más enchufado. O mejor dicho el Fe F.C., que así quisieron llamarse para este encuentro los azulones. Por lo tanto estábamos ante el partido de la fe. La que quería tener el cuadro madrileño. La que los culés tienen en Messi. La que el Barcelona no tuvo en Marc Cucurella. La de Griezmann de demostrar a Koeman que se equivocaba. Y por poner la fe irónica, la que tiene Bartomeu y compañía en que la plantilla se rebaje el sueldo un 20%.

Los de José Bordalás arrancaron el partido presionando y evitando que el Barcelona se sintiese cómodo sobre el verde. A pesar de ello, ocasiones pocas. Las faltas laterales o los balones colgados no encontraban rematador, pero Maksimovic, sobre el cuarto de hora del choque, puso a prueba a Neto con una buena llegada desde atrás. Ganó el guardameta del Barcelona, que blocó el cuero sin problemas. El Cucho Hernández era de los más activos del Fe F.C., luchó y se esforzó, pero tampoco encontraba premio de cara a gol.

Pedri, la gran sensación culé

Los minutos pasaban y el Barcelona se comenzaba a encontrar más a gusto en el Coliseum. En gran parte, por el partidazo que se marcó Pedri. Ese niño de 17 años trajo loca a la defensa azulona. Tanto, que Cabaco le metió un pisotón que cualquier niño de la edad del canario hubiera ido llorando a su madre, pero el ex de Las Palmas está hecho de otra pasta. De sus pies llegaron las mejores ocasiones culés. Una de Messi al palo y la otra la desaprovechó Griezmann. Mano a mano del francés y lanza el balón a las nubes. Antoine 0-1 Koeman.

Tuvo su protagonismo también César Soto Grado. El colegiado no se aclaraba respecto a las amarillas. Una a Piqué por saltar con los brazos y golpear al Cucho. Gerard se lució doliéndose de la cara, ‘haciéndose un Busquets’ cuando el futbolista del Getafe ni le rozó el rostro. Marchando un Oscar para el central culé. Cabaco se jugó la roja y se la perdonaron, Nyom se la mereció por un codazo en la cara de Messi pero no se la enseñaron. Sí la vio Sergi Roberto por protestar esa acción. También recibió una Mata, por otra acción que tal vez no era merecedora de ella.

Con los mismos 22 protagonistas saltaron los dos equipos al rectángulo de juego. El Getafe salió con eso, con mucha fe, y a en el 55′ se encontró con un penalti a favor. Una jugada gris en la que De Jong derribaba a Djené y el colegiado no lo duda. Balón al punto de cal y Jaime Mata que lo mandaba al fondo de la red tras engañar a Neto. El Barça estaba tocado y el Getafe quería el segundo. Para contrarrestar el subidón de los madrileños entraban Ansu Fati y Coutinho por Pedri y un Dembélé que no brilló en el campo donde empezó su pesadilla con las lesiones.

El Barça pierde la fe

Le seguía costando al Barcelona a pesar de que Ansu Fati trató de intentarlo todo lo que pudo. El Getafe hacía lo que mejor se le da: encerrarse y aprovechar su punto fuerte de la defensa férrea que no concede espacios. Aunque Bordalás les ordenase armar una muralla en su área, también iban a por otro gol. Cucurella se topó con Neto en su intentona desde la frontal del área. Minutos después, el Cucho mandaba el balón al larguero. Las mejores ocasiones eran para los madrileños mientras el Barcelona estaba totalmente perdido. Había perdido la fe.

En los últimos 10 minutos los Arambarri, Damián y compañía seguían sin dar tregua al Barcelona. Ni Trincao, ni Braithwaite ni Riqui Puig, que entraron al terreno de juego, fueron capaces de darle otro toque o mejorar la versión al equipo culé. Hasta el Getafe pudo matar el partido en el 88′ con un mano a mano del Cucho, que, inexplicablemente, mandó el balón hasta Leganés. La respuesta la tuvo Messi a la desesperada. El argentino recogió un rechacé en la frontal pero envió el balón fuera ante la presión de cuatro rivales. Justo después, antes del pitido final, Djené estuvo a punto de marcarse en propia meta con un cabezazo, pero la tensión generada en ese momento se esfumó cuando el larguero repelió el balón. Un minuto después, pitido final y victoria de la fe ante la calidad.