Si en España tenemos nuevo embajador de Cartier, Dabiz Muñoz, en Estados Unidos el rapero Jay-Z ha sido el último nombre en poner sobre la mesa la maestría de la marca relojera con una pieza de coleccionista que es puro arte. El resultado no nos puede gustar más.
Porque no hay nada que vista más y mejor que un buen reloj; lo sabemos nosotros y, por descontado, los famosos. De ahí que para la premier de la película ‘Más dura será la caída’, de Jeymes Samuel, el rapero no dudase en sacar a relucir una auténtica obra de elegancia, artesanía y de las que apenas hay 70 unidades en el mundo. Como bien captaron cámaras y expertos en la materia, para la alfombra roja la muñeca de Jay-Z apareció con una joya de coleccionista llamada ‘Cartier Crash Skeleton’.
Fue este clásico visto por vez primera en la década de los 70, y desde entonces siempre que aparece se piensa inexorablemente en su parecido con el cuadro ‘La Persistencia de la Memoria’ de Salvador Dalí, pintado en los años 30 e inspirado en él.
Junto a un elegante y sobrio traje negro, el cantante apareció con un exclusivo reloj en platino que el mismo Salvador Dalí podría haberse encargado de crear; pues, como si se estuviese derritiendo, esta joya de esfera y bisel en movimiento se asoma en la muñeca. Lo hace, además, con un calibre hecho a medida y en su esfera los puentes forman los números romanos de la marca.
Una creación trágica
Pero no, no fue el pintor el encargado de darle forma a esta pieza; sino que cuenta la historia que un gerente de Cartier London fue el responsable. Y una, casi, tragedia, la responsable de la creación: un accidente automovilístico que terminó en incendio provocó que su reloj ‘Maxi Oval’ curvado se derritiese. De este reloj fundido nació la inspiración.
Así, Jean-Jacques Cartier, entonces director de Cartier London, creó un reloj que, irónicamente, recibió el nombre de ‘Crash’.
Dada la derretida forma de la caja, tanto el calibre como los movimientos fueron confeccionados a medida para el modelo, reubicando los barriles y el tren de engranajes.
De su cuidadosa creación y engranaje es lógico deducir el valor de la pieza, creada por vez primera en 1967. Sin embargo, el modelo con el que Jay-Z conquistaba a la audiencia recientemente data de 2015, momento en que la pieza fue relanzada con una esfera esqueletada que permite ver los modernos entresijos de tan codiciado modelo y de la que solo hay 67 piezas en el mundo.
