Una de las grandes pasiones de los coleccionistas es tener piezas que son únicas y, para los que son fanáticos del mundo del motor, los coches de películas o de carreras que han marcado historia son el objetivo principal. Si juntamos ambos aspectos, nos vienen a la cabeza las 24 horas de Le Mans y todos los vehículos que se podían ver en tan aclamada carrera. Una competición que marcó historia y que se considera la prueba de resistencia más ardua del mundo. Los fanáticos del motor están de suerte y sale a subasta el Porsche que condujo Steve McQueen en la película de Le Mans.
Si pensamos en el coche más histórico de la competición, estamos seguros de que te señalarán el Porsche 917K con los colores de Gulf y el dorsal número 20. El diseño, que se convirtió en un icono eterno con el largometraje de Le Mans de Steve McQueen de 1971, pronto saldrá a subasta y promete un precio que, seguramente, sorprenderá. En ella el famoso actor americano, encarnando a un piloto llamado Michael Delaney, está al volante de un Porsche 917K dorsal 20.
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Puede que el Porsche 917 ya fuera uno de los coches más famosos de todos los tiempos en Le Mans gracias a sus dos victorias absolutas en 1970 y 1971, entre muchas otras carreras, pero McQueen lo elevó al estatus de mito en el automovilismo, y ahora los 917 que quedan vivos están entre los ejemplares de la casa alemana más caros del mundo.
El diseño está equipado con un motor original V12 de 4,5 litros, refrigerado por aire y con 580 CV a 8.400 rpm. Esta mecánica ha sido meticulosamente reconstruida por Ed Pink Racing Engines de Van Nuys, en California, asegurando que cada componente funcione a la perfección, llevando a este modelo a una cuidadosa restauración. El chasis ha sido pintado en color negro, como el original y lo han sometido a exhaustivas pruebas para detectar posibles grietas o piezas que estén degeneradas. Los frenos de disco en las cuatro ruedas y la suspensión se han sometido a pruebas, además de ser renovados para garantizar su funcionamiento.
Mecum Auctions, una empresa ubicada en California, es la encargada de ejecutar esta nueva puja que lleva el nombre del Porsche de Steve McQueen. La última vez que se vendió, en el año 2000, ya alcanzó una curiosa cifra y es que se subastó por más de un millón de euros, batiendo récords en las pujas que se han hecho sobre estos diseños. Ahora se vuelve a poner en el mercado y en el próximo evento en Kissimmee, Florida, que se celebrará en enero de 2025. Los pujantes volverán a ver en vivo este referente del cine de carreras y, aunque hayamos visto grandes celebraciones entorno a clásicos de otras marcas, estamos seguros de que este alcanzará una cifra millonaria e incluso superior a la obtenida hace 25 años. Promete ser una de las grandes subastas del siguiente año, abriendo el nuevo ciclo con un resultado millonario.
