Ciencia
Un proyecto futurista que está dando mucho que hablar

Científicos chinos quieren acabar con la basura espacial con potentes láseres

El ser humano es incomprensible. No solo nos vale con ensuciar cada palmo de nuestro planeta, sino que es cada vez más habitual encontrar todo tipo de basura espacial orbitando alrededor de nuestra atmósfera. Unos desechos que pueden dificultar las labores de los astronautas en el espacio e incluso provocar problemas irreversibles en satélites y estaciones espaciales. Por eso desde China creen que la mejor solución a este problema solo puede definirse con una palabra: láseres ¡No te lo pierdas!

Un problema universal

La basura espacial puede generar graves accidentes en el espacio

La basura espacial se almacena por toneladas en las cercanías de la Tierra. Unos desechos que pueden ser bastante peligroso para todo astronauta inmerso en cualquier tipo de misión en el espacio exterior. El gran ejemplo de este tipo de componentes innecesarios puede verse en la película Gravity, donde Sandra Bullock se ve perjudicada gravemente por simples restos propios de la acción humana que circulan por el espacio. Cohetes en deshuso, satélites inoperantes, fragmentos de cohetes… Existe todo tipo de basura espacial en el cosmos, el problema es… ¿cómo la eliminamos? Los chinos tienen la respuesta.

Un grupo de científicos chinos quiere evitar que la basura espacial se acumule a nuestro alrededor hasta que sea imposible deshacernos de ella. Por eso, desde China están trabajando en un proyecto en el que los artefactos láser son los protagonistas. La clave radica en crear dispositivos que orbiten alrededor de la tierra con una única función: destruir basura espacial. Una iniciativa que tiene todas las papeletas para que salga a la luz en escasos años y que se muestra al mundo como el «antídoto» necesario para salvaguardar la seguridad en el espacio.

Pura potencia

Los restos de satélites suelen ser los más habituales

Si hablamos del dispositivo nos estaremos refiriendo a un tipo de láser que es capaz de detectar, por sí solo, las grandes masas de basura espacial que rodean la Tierra. Una vez localizados los restos, tiene lugar un sistema de 20 ráfagas de luz por segundo que acaba con todo lo que se interponga en su camino. La idea principal es que la basura acabe desintegrándose al entrar en la atmósfera o que salga de una vez por todas de la órbita terrestre. El principal inconveniente de este proyecto es que el láser, de momento, solo puede acabar con objetos de pequeñas dimensiones.