Menú de otoño para los niños: Alimentos de temporada e ideas

El otoño es una temporada en la que el frío vuelve a ser protagonista, de modo que debemos procurar que los niños no se resfríen y una de las mejores vías para ello es la alimentación. Aprovechemos los alimentos de temporada para preparar menús de otoño para niños que eviten los resfriados, pero que además sirvan para que conozcan los sabores y colores que tiene el otoño a través de la comida.

Menú de otoño para los niños: Alimentos de temporada e ideas

El verano suele asociarse siempre, en términos de alimentación, a cosas como los helados, las frutas con mucha agua como el melón y a comidas rápidas y frescas, pero el otoño es una temporada en la que podemos aprovechar para que los niños conozcan una alimentación más elaborada o de hecho, más centrada en que les permita llenarse de energía, vitaminas y también, que les ayude a no pasar frío.

En otoño con el cambio de estación es importante que los niños tengan una dieta variada ligada a la estacionalidad: de hecho, la naturaleza ha preparado la estacionalidad de los alimentos y sus propiedades para adecuarlos a esa época del año.

Las frutas y verduras, pero también el pescado, los cereales, las legumbres y los frutos secos son concentrados de vitaminas, sales minerales, fibras y otros preciados nutrientes que deben acompañar a nuestros hijos en esta temporada en la que además están asistiendo a la escuela, ya que todos ellos les ayudan a combatir los primeros resfriados y otras dolencias, algo que es realmente importante este año teniendo en cuenta la situación de pandemia, de manera que debemos ayudar a nuestros niños con una dieta saludable .

Los colores del otoño en los alimentos

Manzanas, peras, caquis, uvas, castañas, brócoli, calabaza, naranjas y muchos otros alimentos coloridos con mil aromas deben ser los protagonistas de nuestras mesas. Pero, ¿cómo convencer a los más reticentes de comer estos alimentos?

En primer lugar, varía el menú de otoño de tus hijos : la elección es lo suficientemente amplia como para hacernos proponer comidas diferentes cada día, o cocinarlas de manera diferente.

Los colores son atractivos para los niños, un poco menos la textura de las verduras, que no a todo el mundo le encanta. En este sentido, puedes intentar cocinar sopas o pastas, combinando múltiples sabores o eligiendo una sola verdura, para combinar por ejemplo con un poco de patata hervida y queso parmesano, con un chorrito de aceite crudo y tal vez algunos trocitos de pan. ¡Seguro que presentadas de esta manera las verduras tendrán un sabor diferente!.

Platos con legumbres

Por otro lado, esta es para muchas familias, la temporada en la que comienzan a cocinarse muchos de los tradicionales potajes que se elaboran en España. Platos en los que ingredientes como las lentejas o los garbanzos son esenciales. De hecho gracias a las legumbres podemos conseguir que los niños reciban un buen aporte de hierro, vitaminas, hidratos de carbono de absorción lenta, fibra y en proteínas. Además también aportan calcio y ácido fólico, de modo que no lo dudemos y acostumbremos a nuestros hijos desde bien pequeños a comer platos como por ejemplo, unas buenas lentejas estofadas.

Las frutas de otoño

En cuanto a la fruta, la temporada de otoño ofrece ante todo una variedad de manzanas y peras que también son muy adecuadas para la elaboración de tartas caseras , muffins y galletas . Entonces, ¿por qué no intentar crear con ellos un bizcocho sabroso y saludable que también puedan llevar al colegio como desayuno  o consumir en casa con un poco de leche o un zumo de naranja y mandarinas para llenarse de energía?

La bollería es sabrosa pero también rica en grasas malas y conservantes y aditivos químicos, por lo que sustituirla por desayunos y meriendas caseras cuando se puede, elaborados con fruta fresca, es el consejo de muchos pediatras.

Los frutos secos típicos de esta época es otro alimento rico en propiedades beneficiosas: las almendras, nueces y avellanas contienen minerales y fibras muy importantes para la atención y concentración y para el desarrollo cerebral de nuestros hijos. Sin embargo, si son pequeños o no le gusta comer frutos secos en solitario, una alternativa práctica y sabrosa puede ser para preparar barritas energéticas, que también pueden llevar a la escuela como un bocadillo, tal vez añadiendo miel y cereales, o un poco de chocolate que seguro que a los niños les encantará.

La castaña, verdadero símbolo del otoño, tiene propiedades realmente increíbles: está repleta de minerales como el potasio y vitaminas, especialmente B2 y PP, que protegen los tejidos. Pero también contienen almidón, que forma parte de carbohidratos complejos y aporta energía de liberación lenta, ideal para nuestros niños que siempre están activos. De hecho, también se recomiendan para quienes practican deporte, pero deben consumirse cocidas o asadas, posiblemente fuera de las comidas y sin pasarnos en la cantidad. Se recomienda administrarlas después de los 12 meses de vida.

El pescado de temporada

Por último también mencionamos el pescado de temporada , desde pescados azules como anchoas y salmonetes hasta crustáceos como sepia y calamar hasta lenguado, besugo, lubina y pez espada. Cada uno de estos pescados contiene nutrientes muy importantes para los niños, especialmente omega 3 .

Muchos de estos pescados proceden del Mediterráneo y por ello podemos encontrarlos frescos y a precios asequibles. Si a nuestros niños no les gusta este alimento, tienes muchas recetas para presentárselo de forma alternativa y más cautivadora, desde albóndigas hasta nuggets, desde primeros platos a base de pescado hasta preparaciones al horno.

En definitiva, tenemos que  encontrar con nuestros hijos el menú más adecuado para llenar de energía y salud en esta colorida temporada.