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Cómo aprovechar el chocolate de los huevos de pascua

Dos recetas fáciles de hacer y muy divertidas, que nos van a servir para aprovechar todo el chocolate que podemos haber acumulado durante la Semana Santa.

La Semana Santa ha llegado a su fin y aunque todavía hoy lunes es festivo (Lunes de Pascua) en algunas comunidades, puede que en los próximos días te des cuenta que los niños tienen mucho chocolate acumulado aunque no debes preocuparte, ya que existen distintas ideas o recetas que nos van a servir para «reciclar» o para aprovechar los huevos y figuras de pascua que les hemos ido comprando estos días.

Cómo aprovechar el chocolate de los huevos de pascua

Puede que les hayamos comprado una bolsa llena de huevos de pascua o que algún familiar haya regalado a los niños distintas figuras de chocolate. Puede que la tradicional «mona de pascua» nos haya llevado a comprar también figuras y huevos, de modo que es algo normal que te acabes dando cuenta de todo el chocolate que se puede llegar a acumular tras la Semana Santa.

Por ello, preparémonos para aprovechar todo ese chocolate de los huevos de Pascua que tenemos en casa, de modo que podamos elaborar postres o dulces que volverán locos a nuestros hijos.

El nido de chocolate y fresas

El primer postre reciclado que os vamos a explicar es sin duda, el más sencillo de todos, pero también es una auténtica bomba atómica de gusto y sabor.

Simplemente necesitaremos:

Estos son los pasos a seguir:

  1. Abrimos el huevo de chocolate por la mitad procurando que no se nos rompa ya que debemos mantener las dos partes intactas.
  2. Preparemos dentro de cada mitad una cama de fresas picadas y, encima, una generosa capa de nata montada.
  3. Luego colocamos una capa de fresas enteras y cubierta además por los trozos de chocolate. de otro huevo  o de una figura que vamos a romper bien.
  4. Podemos acabar de cubrir con un poco más de nata. ¡Listo! Seguro que será imposible que los niños se resistan a este postre.

Cubitos de chocolate

  1. Para hacer este otro dulce o postre a partir de los huevos de chocolate que hayamos acumulado estos días, tenemos que derretir el chocolate de varios huevos y figuras (dependerá del tamaño que tengan para derretir una mayor o una menor cantidad).
  2. Después de haberlo derretido al baño María, esperamos unos instantes y lo vertimos en los moldes para cubitos de hielo.
  3. Nivelamos con una espátula y dejamos reposar fuera de la nevera, hasta que el chocolate se haya enfriado.
  4. Será entonces cuando podremos meterlo en el frigorífico y al cabo de dos horas tendremos cubitos de chocolate que podemos añadir a la leche de los niños que seguro van a querer ver cómo se derriten poco a poco mientras van «tiñendo» la leche.