Una concejal de Carmena reconoce que «los ayuntamientos del cambio han sido un desastre»

Montse Galcerán, concejal del equipo de Manuela Carmena, ha reconocido que «los ayuntamientos del cambio han sido un desastre». En una entrevista radiofónica, la que fuera presidenta de las Juntas Municipales de los distritos de Tetúan y Moncloa-Aravaca se abre en canal y se reconoce desilusionada con lo que fue la política ‘post 15-M’.

En el podcast Logaritmos Amarillos, la también catedrática de Filosofía y activista explica que «nos faltó valentía, arrojo y tener las cosas claras». «No podemos dejarnos arrinconar como si fuéramos niños de Educación Primaria», argumenta esta ex concejal que acabó muy distanciada de Manuela Carmena por, según ella, traicionar lo que venía a ser la candidatura Ahora Madrid.

«En un primer momento leímos el 15-M como la multitud en alto, que pone en cuestión en todo, pero ese poder constituyente no siempre es capaz de construir estructuras adecuadas y en nuestro caso fue así, es evidente», lamenta esta política nacida en Barcelona.

Explica que Ahora Madrid y otras iniciativas políticas municipalistas «si no logra un mínimo de organización, comunicación y institucionalidad parece como que se pierden». «Nosotros no fuimos capaces de crear una nueva institucionalidad, lo intentamos y quedó muy flojo», reconoce ahora Montse Galcerán.

«Me dan ganas de llorar»

«Sigo pensando que el municipalismo puede ser una vía pero hay que trabajarlo muchísimo más. Por cierto, estoy escribiendo mi experiencia en ese periodo y a veces me dan ganas de llorar», expone en la entrevista.

No obstante, indica que igual dentro de unos años vuelve la izquierda a las instituciones municipales y cambia de opinión. De todas formas, ahora se muestra muy crítica con lo logrado en los cuatro años de Ahora Madrid. También engloba a otras experiencias similares bajo el nombre de «los ayuntamientos del cambio», un apelativo que también englobaba a los Gobiernos de Barcelona (Ada Colau), Valencia (Joan Ribó), Zaragoza (Pedro Santisteve) o Cádiz (José María González, Kichi).

Precisamente sobre el 15-M, que para Galcerán es el comienzo de estas experiencias políticas fallidas, señala que «fue un cambio de paradigma, un cambio de chip, pasamos de protestas sectoriales a entender que somos multitudes urbanas vulnerables que queremos protegernos ante unos ataques brutales. Eso fue importante».

«Mi crítica después de pasar por el Ayuntamiento es que, a pesar de que pensé que el 15-M era un plus, el aprender a luchar desde la vulnerabilidad, lo he visto (en el Consistorio) como una asunción de la debilidad propia porque nosotros nunca vamos a responder. Quizá es que estoy muy dolida con esas cosas. La política institucional es horrible pero (faltó) fuerza, fortaleza, autodefensa…», afirma la ex concejal.

Polémicas

Esta concejal, como muchos otros ediles de Ahora Madrid, acumuló polémicas por su gestión. Al comienzo del mandato estuvo en el punto de mira por traer al carnaval de Tetuán, distrito del que era presidenta, los polémicos títeres que clamaban «Gora Alka-ETA».

También suscitó controversia su declaración de bienes. A pesar de contar en su haber con nueve inmuebles entre Madrid y la Ciudad Condal apoyaba activamente a los okupas del colectivo Patio Maravillas. Desvelaba el valor catastral de cinco de esas propiedades y sumaba una cifra total de 483.593 euros.

Reprobación

A esto se sumaba la actitud «autoritaria y arbitraria» que desplegaba en los Plenos de distrito. Esto llevó a su reprobación con los votos a favor de PP y Cs y la abstención de los socialistas. «La actitud de esta concejal presidenta no era la apropiada para dirigir ningún Pleno», afirmó la hoy concejal de Deporte, Sofía Miranda, que el pasado mandato era la edil adscrita de Ciudadanos en Tetuán: «Politiza el Pleno, echó a una vecina, trata con desdén a asociaciones que no le dan la razón… y además es que tiene una actitud muy autoritaria».

Desde Ahora Madrid, Iván Cases acusó a Ciudadanos de querer crear un «circo» en el Pleno del distrito de Tetuán. «Un circo trufado de mentiras y trucos«, argumentó, para añadir a continuación que «se ha abusado del talante dialogante» de la concejala-presidenta.

Sin embargo, el PSOE también criticó la «inacción» de la Junta de Tetuán en la gestión de asuntos clave. «Es verdad que muchas de las proposiciones que se presentan no se realizan», ha expresado el vocal vecino socialista.

El PP enumeró «motivos para reprochar su ejecución del cargo institucional». «Desde el respeto institucional que me merece, se lo digo: su parcialidad en el Pleno afecta a la falta de empatía y capacidad de resolución frente a los vecinos y los problemas relevantes que han tratado de presentarle», apuntó Manuel Gómez, vocal vecino por los ‘populares’.

Galcerán tomó la palabra para asegurar que «el abuso de autoridad» que le achacan no es «verificable» y que «no se aportan datos» al respecto. «Además, los datos que aportan son falsos», lanzó. Negó la expulsión de nadie del Pleno, en contra de lo defendido por la oposición. «Todos los que me conocen saben que he sido impulsora de la introducción de pedagogías no autoritarias. Como persona dedicada a la docencia he entendido siempre que el autoritarismo presenta problemas, sobre todo a la hora de solventar conflictos… y tanto como profesora universitaria como directora de grupos de investigación he tenido un trato horizontal… y ganar unas elecciones no me ha cambiado», trasladó.

Entonces afirmaba que le el hecho de que haya algún vecino enfadado con ella «es lo más natural de la Tierra», porque es «lógico que en una ciudad haya conflicto». «Habrá personas que digan que ahora se hace poco, igual que antes, es lógico que haya personas de distintas convicciones», afirmó para comentar que la reprobación se debía a una estrategia «cortoplacista» que le da «mucha pena» ya que «por unos votos quieren dinamitar el distrito». «Que la bancada de la derecha me repruebe entiendan que es un honor», zanjó.