Kiko Rivera, Julio José Iglesias y Elena Tablada ‘boicotean’ la cena de Toñi Salazar
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Esta semana en ‘Ven a cenar conmigo gourmet edition’ le ha tocado el turno a Toñi Salazar. La cantante de Azúcar Moreno recibió en su casa -ella sí que usó su domicilio real y no como Elena Tablada en el programa anterior- al resto de concursantes. Una velada que intentó preparar con mucho esmero y cariño pero que resultó ser un fiasco.
Lo que en un primer momento parecía una comida idílica acabó convirtiéndose en una batalla campal de los invitados contra la anfitriona, un hecho donde la mala mano de Toñi con los fogones tuvo mucho que ver. Julio José Iglesias fue el primero en llegar a la casa, un espacio al que calificó de «normal. Ni bonita, ni fea». Acto seguido el también cantante -que ya aclaró en la cena de Elena Tablada que es vegetariano- tuvo que aguantar la presión de la vocalista de Azúcar Moreno para que probara la cecina que había preparado como aperitivo. La negativa fue rotunda y para más inri Toñi Salazar no fue capaz de explicar a sus invitados de qué animal provenía su plato, algo que importó poco dado que ellos tampoco lo sabían.
Toñi Salazar junto a sus invitados: Elena Tablada, Julio José Iglesias y Kiko Rivera/ Mediaset
El desastre comenzó nada más acomodar a los comensales en la mesa y es que la ausencia de servilletas o bebidas fueron algunos de los ‘despistes’ que el resto de participantes recriminaron a la cantante. El primer plato no fue del agrado de los famosos ya que que el el grosor con que estaban cortados los ingredientes y la falta de algunos elementos como el aceite y la sal deslucieron la obra de Toñi. «Yo tengo muy poca paciencia y os voy a mandar por culo a los tres», decía la pacense mientras iba a la cocina para llevar a sus invitados lo que le pedían. Kiko Rivera, que suele ser de buenos contentos en lo que respecta a la comida, confesó que había tenido problemas a la hora de ingerir los trozos de tomate, un apunte al que Salazar respondió así: «Si el tomate está mas gordito pues lo cortas más finito y te lo vas comiendo. Esto es un poco por tocar las narices».
Toñi Salazar mostró su hartazgo a consecuencia de las peticiones de sus comensales/ Mediaset
Si el primer plato fue complicado de engullir, el segundo no lo fue menos. Su ‘pollo bandido’ no gustó a los concursantes y así se lo hicieron saber a la intérprete de ‘Sólo se vive una vez’. Para terminar de enfadar a la anfitriona Julio José Iglesias preparó delante de allí los presentes un aguacate, que había traído de su casa, y comenzó a comérselo. Este gesto hizo saltar a Toñi, que muy seria dijo: «Me parece muy feo cómo os estáis comportando. Yo os he abierto mi casa, os he puesto de comer…Os estáis riendo de mí y de mi comida», una reprimenda a la que añadió: «A vosotros lo que os pasa es que sois más pijos que Mafalda». Esta afirmación no gustó a sus compañeros, que reiteraban una y otra vez que ellos no era eso que Toñi les había llamado. «Si ser pijo es viajar, cantar, hacer snowboarding y emborracharse sí. Soy pijo», asentía Julio José de manera irónica.
Pese a que la cena no salió todo lo bien que la cantante pacense esperaba, con la llegada de su hermana Encarna parece que Toñi recuperó la cordialidad en su mesa. Risas, cante, baile y algunas ‘pullitas’ fueron la tónica general entre los concursantes, que acabaron inmersos en una auténtica juerga gitana. «Son unos cabrones, me habéis boicoteado. Sois pijos pero buena gente. Ha salido todo mal pero yo me he divertido muchísimo y nada más que por eso ha merecido la pena», decía la artista para después prometer que se cobrará la revancha en las próximas casas a las que le tocará ir en calidad de invitada.