El último cumpleaños feliz del rey Juan Carlos

Un cumpleaños muy diferente a lo que podría haber imaginado. No cumple una cifra redonda, pero a esta edad, más que nunca, cualquier año es todo un regalo de la vida. El rey Juan Carlos sopla ochenta y tres velas y lo hace muy lejos del que los últimos años ha sido su hogar, el Palacio de la Zarzuela. Instalado en Emiratos Árabes desde el pasado mes de agosto, don Juan Carlos tenía en un principio previsto volver a España por Navidad. El exmonarca incluso confirmó a través de su equipo de abogados que había zanjado sus cuentas pendientes con la Agencia Tributaria -a pesar de que parece que las investigaciones siguen su curso de momento-, pero fuentes oficiales anunciaron que el padre de Felipe VI no viajaría a España en Navidad debido al riesgo que suponía para su salud la situación de emergencia sanitaria.

Por primera vez en mucho tiempo, don Juan Carlos pasaba la Nochebuena fuera de Zarzuela, al igual que el último día del año, aunque esto ya era costumbre en los últimos tiempos. Hace apenas unas horas, en el programa “Viva la vida”, emitían la única imagen que se tiene del que fuera jefe del Estado durante casi cuarenta años desde que se confirmara su ‘exilio’ a Abu Dabi. Una imagen captada hace algunos días en el puerto de la ciudad y que es la prueba más clara de que el exsoberano continúa allí. En la fotografía se ve a don Juan Carlos caminando con cierta dificultad y apoyado en dos personas -sus escoltas-. El padre de Felipe VI se muestra cabizbajo, viste pantalón y chaqueta y luce mascarilla, tal como recomiendan las autoridades sanitarias.

Una imagen impactante que nada tiene que ver con las últimas fotografías que se tienen del exmonarca, que cumple ahora ochenta y tres años. Un aniversario que, si bien no es especialmente significativo en cuanto a la cifra que representa, sí implica mucho para el padre de Felipe VI en su actual circunstancia. Y es que la última vez que don Juan Carlos disfrutó de una celebración a lo grande fue hace tres años, por su ochenta cumpleaños.

Unos festejos que, si bien no cumplieron sus expectativas, fueron lo más parecido a un homenaje público a su labor como rey, mucho antes de que se tuviera constancia de los escándalos que han provocado su salida de España. En aquella ocasión, don Juan Carlos disfrutó de un almuerzo privado en el Palacio de la Zarzuela el mismo día de su cumpleaños. Un almuerzo al que asistieron personas de su círculo más íntimo -imposible olvidar además el vestido-tributo de doña Letizia a la reina Sofía- y en el que solo faltó la infanta Cristina, que por entonces no había retomado su papel dentro de la familia del rey, ya que Iñaki Urdangarin estaba pendiente de la decisión del juez.

Pero no fue esta la única celebración prevista para el exrey. Al día siguiente, por primera vez desde la abdicación, don Juan Carlos y doña Sofía acudieron al acto castrense con motivo de la Pascua Militar, el mismo que en 2014 había supuesto la evidencia más clara del desgaste del padre de Felipe VI, con aquel discurso en el que el exmonarca se trababa de manera constante. Fueron varios los actos programados a lo largo del año a modo de tributo al rey Juan Carlos, algunos de los cuales se hicieron extensivos a doña Sofía, que meses después también cumplía ochenta años. Sin embargo, el exrey no quedó satisfecho, ya que esperaba una celebración como la que tuvo Harald de Noruega por su onomástica y en la que don Juan Carlos y doña Sofía nos regalaron algunos de los momentos de mayor complicidad de los últimos tiempos.

La última gran fiesta

Hace más de una década, cuando don Juan Carlos cumplió setenta años, sí que disfrutó de una gran celebración por todo lo alto. El día 9 de enero, algunos días después de su aniversario, cuatrocientos representantes de las más altas instituciones del Estado de los últimos treinta y dos años se reunieron con la Familia Real para celebrar el cumpleaños del entonces jefe del Estado en una cena que tuvo lugar en el Palacio de El Pardo.