Los mejores momentos de los Reyes en lo que va de gira por España
Felipe VI y Letizia comenzaban su aventura turística por la península el pasado 23 de junio, dejando para el recuerdo infinidad de anécdotas de lo más divertidas
Los Reyes comenzaron hace unas semanas un tour por todas las comunidades autónomas de España para visualizar y apoyar la recuperación de la actividad social, económica, laboral y ciudadana, una vez concluido el Estado de Alarma decretado por el coronavirus. Su primer destino tras el pistoletazo de salida fue Canarias, donde visitaron la Casa Museo de Pérez Galdós, con motivo del centenario de su muerte. Durante su visita a Las Palmas, don Felipe y doña Letizia se mostraron muy cercanos con todo el mundo -eso sí, respetando la distancia de seguridad-.
Fue en ese momento cuando la Reina caía en una pequeña “trampa” pensada por un bañista. Comentando lo agradable que resultaba volver a ver ese ambiente de ocio, Letizia dijo “¡Qué maravilla!” a lo que le respondió el bañista “Casi mejor que Ribadesella”, un comentario que la Reina de España se tomó con humor. Pero su visita a la isla no acabó ahí, sino que aún siguió dando de qué hablar. Tras la charla con los autóctonos que se encontraban en la playa, Felipe y Letizia hicieron una breve parada en un bar de tapas, donde les ofrecieron un plato de jamón que aceptaron sin dudarlo. Fue entonces cuando doña Letizia dio a don Felipe una curiosa indicación, protagonizando una anécdota que no ha tardado en hacerse viral: “Apóyate en la barra”, decía con su espontaneidad tan característica para disfrutar aún más si era posible del jamón de la zona.
La segunda etapa de su gira por España llevó a los Reyes hasta Mallorca. Don Felipe y doña Letizia arrancaban su visita oficial con un encuentro con diversos colectivos sociales y charlando con las autoridades baleares. La jornada terminaba con un agradable paseo por la playa del Arenal. Allí protagonizaban un momento muy curioso cuando, conversando con algunos bañistas e incluso felicitando el cumpleaños a un niño que estaba en la playa, Felipe y Letizia se paraban para dialogar con unos turistas alemanes, que, tras preguntarles por su primera impresión sobre la isla, concluían la conversación con un rotundo: «Welcome to Spain».
Segunda semana de la gira de los Reyes
Pero la agenda de los Reyes continuaba su curso y su siguiente destino fue Andalucía a comienzos de semana, con una cita matutina en Sevilla y por la tarde en Córdoba. Su paso por la ciudad arrancaba en las Tres Mil viviendas, donde fueron recibidos con los vítores de muchos vecinos que les esperaban al grito de «¡Nosotros también somos Sevilla!» y vivas al Rey. La anécdota del día la protagonizaba don Felipe al pasar por la Catedral de Sevilla, cuando una ciudadana se acercaba a saludarles, dirigiéndose al Rey dispuesta a darle la mano, a lo que él reaccionaba, siguiendo las recomendaciones sanitarias, ofreciéndole el codo. Un sencillo y divertido gesto con el que evitó cualquier tipo de contagio.
Ya por la tarde, a partir de las 18:45 horas, Felipe VI y la Reina se desplazaban hasta Córdoba, donde su visita comenzó en la Puerta de Sevilla, una de las entradas al barrio del Alcázar Viejo San Basilio. Acompañados de las autoridades, se dirigieron a algunos de los patios más simbólicos de la ciudad, declarados Patrimonio Intangible de la Humanidad, donde fueron recibidos por un baño de multitudes -¡y de flores!- y pudieron visitar uno de los patios que más cordobeses y turistas atrae: el que se encuentra en la Calle San Basilio, 44, sede de la Asociación de Amigos de los Patios de Córdoba. Allí, protagonizaron una de las típicas fotografías turísticas posando en la escalera del patio.
La gira se vio obligada a sufrir un parón para que Felipe VI pudiera presidir un acto histórico: la reapertura de fronteras tras tres meses y medio de cierre entre España y Portugal debido al coronavirus. El Rey volvía a protagonizar una anécdota cuando, al bajarse del coche en el que llegaba, tendía la mano a Pedro Sánchez para saludarle, retirando rápidamente su gesto como medida de prevención. Y es que, después de todas las experiencias vividas por los Reyes durante su tour por Canarias, Baleares y Andalucía, Felipe y Letizia llegaban a la ciudad castellanomanchega de Cuenca con un buen reguero de más anécdotas -una de ellas es de lo más romántica-.
Los reyes charlaban con muchos vecinos a su paso por la ciudad cuando se encontraban con una vendedora de lotería de la ONCE y no dudaban en probar suerte. Tal y como ella misma relataba a Telecinco, los Reyes se llevaron a casa todos los cupones que tenía a la venta con un número muy concreto, que en este momento ya es el más codiciado. ¿Qué tiene de especial esta numeración? Es la fecha de la boda de los Reyes: el 22 de mayo de 2004. Una anécdota que todavía cobra más fuerza si tenemos en cuenta que fue precisamente esta ciudad la primera que visitaron los Reyes después de su boda. Otra de las anécdotas tenía como protagonistas a los trabajadores del Museo Arqueológico de Cuenca que salían al encuentro de los Reyes con una fotografía en la que se podía ver a los reyes don Juan Carlos y doña Sofía en ese mismo museo años atrás. Entonces, don Felipe y doña Letizia agradecieron el gesto y desearon que empezasen a llegar los visitantes a la ciudad. Esta última parada ha sido la más especial hasta el momento para los soberanos, pues Cuenca se trata nada más y nada menos del destino donde comenzaron su luna de miel y regresaban 16 años después de la primera vez que recorrieron sus calles como marido y mujer.
Comunidad Valenciana
Felipe y Letizia/ Gtres
Por último, los Reyes cerraron la segunda semana con un viaje la Costa Blanca. Benidorm fue la primera parada. Una de las cunas del turismo en el Levante les recibió con los brazos abiertos. Letizia volvió a confiar en Adoldo Domínguez y estableció su particular ley fashion para este tour por España. El mismo viernes por la tarde, el monarca y la consorte de desplazaron hasta Valencia, donde presidieron la entrega de los Premios Nacionales de Innovación y de Diseño 2019. La Reina, cómo no, vestida de rojo.