Muere Alfonso Cortina, marido de Miriam Lapique, por coronavirus

Alfonso Cortina ha fallecido a los 76 años de edad por coronavirus en un hospital de Toledo, donde permanecía ingresado desde el pasado 24 de marzo tras haber dado positivo en la COVID-19. A pesar del tiempo que llevaba interno en el centro médico, su pronóstico no era malo y la familia tenía esperanzas en que pudiera salir adelante, según publica La Otra Crónica.

Expresidente de Repsol y marido de Miriam Lapique, el empresario era cuñado de Cari Lapique y Elena Cue y amigo y familia de ‘Los Albertos’, como popularmente se conoce a Alberto Alcocer (su primo) y Alberto Cortina (su hermano). Alfonso formaba parte de la jet set española de hace décadas, siendo el más discreto de un grupo de amigos cuyos escándalos ocuparon titulares en más de una ocasión.

Lamentamos profundamente el fallecimiento de Alfonso Cortina, que fue presidente de Repsol desde el año1996 al 2004. Trasladamos nuestras más sentidas condolencias a su esposa e hijos. #DEP pic.twitter.com/1HP0DOaRhd

— Repsol (@Repsol) April 6, 2020

La noticia de la muerte del empresario llega poco más de dos semanas después de la de Carlos Falcó, el Marqués de Griñón, y tres días más tarde que la de Francisco Hernando, más conocido como ‘El Pocero’, siendo una triste casualidad el hecho de que Cortina era amigo personal de ambos fallecidos.

Fue precisamente el padre de Tamara Falcó quien inicio a Alfonso Cortina en el mundo del vino, siendo el marido de Miriam Lapique un reconocido bodeguero en cuya finca de viñedos estaba pasando la cuarentena cuando comenzó a sentirse indispuesto.

El pasado diciembre tanto Alfonso Cortina como Carlos Falcó fueron premiados por la asociación AMAVI y en dicha gala el cuñado de Cari Lapique reveló, hablando de su empresa, que era la primera vez en la historia que se trabajaba ese tipo de viñedo en una zona como la que él había elegido para hacerlo.

Alfonso era padre de dos hijos, Felipe y Carlos, que han vivido y viven tan alejados de los focos como si difunto padre y su discreta madre. Su formación, en los centros educativos más prestigiosos del mundo, ha hecho que ambos cuenten con nombres tan conocidos como los de Marta Ortega y Carlos Torretta y Amaia Salamanca y Rosauro Varo entre su grupo de amigos, pero su vida personal se desarrolla completamente alejada de los medios de comunicación y las alfombras rojas.