España
Gobierno Pedro Sánchez

El Gobierno no presentará los Presupuestos hasta tener el beneplácito de ERC

Sánchez quiere evitar, como ocurrió el año pasado, que ERC recule a última hora y no permita su aprobación

  • Joan Guirado
  • Corresponsal de Gobierno y Casa Real. Siguiendo la actividad del presidente y líder del PSOE, Pedro Sánchez, y del Rey de España. También política catalana.

La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, no presentará los Presupuestos Generales del Estado (PGE) hasta que no tenga el beneplácito de ERC a las cuentas. De esta forma, Moncloa vuelve a otorgar el timón de la gobernabilidad de España a los golpistas catalanes.

Fuentes cercanas a la también portavoz del Gobierno indican que la voluntad del Ejecutivo es que los números sólo sean entregados a la cámara cuando tengan garantizado el apoyo de los de Oriol Junqueras durante el trámite parlamentario. Ni Pedro Sánchez ni Montero quieren volver a arriesgar como el año pasado que, pese a buenas palabras, finalmente ERC se descolgó del acuerdo y acabó dando carpetazo a la legislatura

La intención de Sánchez sigue siendo aprobar los PGE antes de finalizar el verano, es decir, antes del 21 de septiembre. La duda es cuándo empezará el trámite parlamentario de las cuentas públicas. Hasta hace unos días el Gobierno defendía la necesidad de presentar el proyecto de ley en marzo para cumplir con el calendario previsto de aprobarlos a lo largo del verano. Pero Junqueras, en una entrevista en ‘La Sexta’, evidenció el domingo que su formación, por ahora, no tiene previsión de apoyar las cuentas.

Este martes, en paralelo a la celebración del Consejo de Ministros, el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, condicionaba el voto definitivo de su grupo parlamentario a los frutos de la mesa de negociación. Sin embargo, el Gobierno quiere desvincular una cosa de la otra.

El Gobierno socialcomunista necesita el apoyo indispensable de ERC para sacar adelante los primeros presupuestos del presidente Sánchez. La debilidad del Ejecutivo, que salió adelante gracias a la abstención de ERC y EH Bildu, deja en manos de los golpistas la aprobación de la que es considerada para cualquier gobierno la ley más importante de la legislatura.