España
Ley de Seguridad Ciudadana

Abascal tras el pacto de Sánchez con Bildu: «Los terroristas hacen las leyes de seguridad»

"Nunca un gobierno traicionó tanto a la Nación. Sánchez traidor", ha señalado el líder de Vox

El líder de Vox, Santiago Abascal, ha arremetido contra el Gobierno de Pedro Sánchez tras pactar con Bildu la modificación de la Ley de Seguridad Ciudadana, autodenominada por la izquierda como Ley Mordaza. «Hoy Sánchez ha decidido que sean los terroristas los que hagan en España las leyes policiales y de seguridad», ha asegurado Abascal en alusión a la formación de Arnaldo Otegi, que ha sido la encargada de explicar ante los medios este acuerdo, en lugar de los socialistas. El PSOE ha aceptado eliminar los denominados «aspectos lesivos» de la norma, con los cuales se protege a los agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

«Nunca un gobierno traicionó tanto a la Nación. Ni agua a este gobierno, ningún pacto con el gobierno que deja a los pies de los terroristas y delincuentes a la las fuerzas de seguridad y a la sociedad española. Sánchez traidor», ha afirmado Santiago Abascal este jueves en un mensaje en redes sociales tras haberse conocido el acuerdo entre PSOE y Bildu. De esta forma, el líder de Vox descarta alcanzar cualquier tipo de pacto con los socialistas o con el Gobierno de Pedro Sánchez.

La portavoz de Vox en el Congreso, Pepa Millán, también se ha mostrado en esta línea sobre el acuerdo del Ejecutivo de Sánchez con Bildu para modificar la Ley de Seguridad Ciudadana. Millán ha recordado el pasado de la formación de Arnaldo Otegi. «Que los verdugos del pueblo español sean quienes redacten las leyes da buena cuenta de la bajeza de este Gobierno, que no hace nada por reclamar el esclarecimiento de los más de 300 asesinatos sin resolver. El brazo político de ETA debe estar en la cárcel, no en el Congreso», ha lamentado.

«Aspectos lesivos»

La portavoz de Bildu en la Cámara Baja, Mertxe Aizpurua, ha asegurado en rueda de prensa que han acordado con los socialistas «reformar las cuatro cuestiones pendientes» de la Ley de Seguridad Ciudadana, en concreto los «aspectos lesivos». Entre ellos, ha mencionado las «faltas de respeto, la desobediencia, las pelotas de goma y devoluciones en la frontera», conocida como devoluciones en caliente.

Aizpurua ha esgrimido que la nueva norma acabará con la «discrecionalidad en las sanciones para las faltas de respeto», que deberán ser «objetivables y justificadas». «Protegiendo el derecho a la libre expresión», ha indicado. La diputada de Bildu ha subrayado que las sanciones por falta de respeto se cancelarán en caso de «que la persona sancionada se retracte». «Las sanciones por desobediencia pasarán de falta grave a falta leve», ha explicado.

«Todo ello quedará reflejado en una nueva ley que sustituirá a la Ley Mordaza», ha recalcado. «Esta nueva ley orgánica de libertades y seguridad ciudadana recoge todos los acuerdos y avances logrados entre los diferentes grupos en la tramitación de la legislatura pasada, a los que se suman ahora las cuatro cuestiones pendientes del acuerdo que hoy presentamos», ha zanjado.

Reforma ansiada por la izquierda

Todos esos «aspectos lesivos» que menciona Aizpurua son los que «generaron un bloqueo en la anterior legislatura», como ha recordado la portavoz de Bildu.  La ley fue aprobada por el Gobierno del PP liderado por Mariano Rajoy en 2015, cuando contaba con una mayoría absoluta. Desde entonces, las críticas por parte de los partidos de izquierda no paraban de sucederse. Ya marzo de 2017 el PSOE intentó, sin éxito, tramitar esta reforma en el Congreso, ante un Gobierno del PP de Rajoy en minoría parlamentaria.

En la anterior legislatura también trataron de modificar esta norma infructuosamente. El Ejecutivo negoció durante un año y medio con sus socios en más de 50 reuniones formales e informales. La propuesta del Gobierno modificaba 36 de los 54 artículos de la Ley de Seguridad Ciudadana. Sin embargo, no tocaba ninguno de los preceptos que desde los partidos de la izquierda radical consideran «más lesivos». Son cuatro artículos que desde el inicio marcan las discrepancias, especialmente el material antidisturbios.

La reforma no salió adelante después de que ERC y Bildu votaran en contra del dictamen en la Comisión de Interior en marzo de 2023. Sus votos se sumaron a los de PP, Vox, Ciudadanos, UPN y Junts, sumando un total de 19 noes frente a los 18 síes de PSOE y Podemos.