Economía
Telecomunicaciones

Las ‘telecos’ ya no resisten más la inflación y preparan subidas de tarifas para septiembre

Pese a que las operadoras de telecomunicaciones en general siguen aguantando estoicamente el embate de la inflación sin subir los precios, esta situación cambiará en septiembre, para cuando se prevén incrementos de las tarifas de las grandes telecos, cada vez más «asfixiadas» por los estrechos márgenes que se obtienen ante la intensa guerra de precios que se viene produciendo en los últimos años, señalan fuentes del sector.

«Las subidas vendrán a la vuelta de verano porque ahora los usuarios están esperando a que les den más datos, que son más necesarios porque la gente se mueve más, está más fuera de casa. Así que en verano seguirá habiendo ampliación de gigas gratis para retener a los clientes», sostienen.

Pero septiembre será el punto de inflexión, una época en la que las telecos echan toda la carne en el asador para captar nuevos clientes acudiendo al reclamo del fútbol, que con el inicio de la temporada suele generar muchas altas nuevas. Será ese producto -cuyos derechos de retransmisión son muy caros- el que seguramente experimentará más alzas en el precio respecto al año pasado, aseguran las mismas fuentes. «El elevado coste del fútbol repercutirá en el precio de los paquetes», indican.

Y es que el negocio no da para más. Orange tiene previsto subir el precio de sus tarifas Love Original y Extra a partir del 31 de julio entre 2 y 5 euros, según ha comunicado recientemente a sus clientes. Y Telefónica ya ha introducido un aumento de precios encubierto, añaden, puesto que tras los cambios que ha hecho en sus ofertas, ahora el cliente puede elegir más y contratar lo que quiere, no todo el paquete completo. «Por ahí hay algo de subida de precio. Si antes se pagaba, pongamos, 150 euros, y ahora se pueden quitar cosas y dejarlo en 100, baja la tarifa, pero a nivel de servicios, si contabas todo antes, ahora está subiendo un poquito», explican. Por su parte, Vodafone todavía no ha emprendido ninguna acción en ese terreno.

Miedo a subir tarifas

En el sector de las telecomunicaciones español, el único que es deflacionario como resultado de esta cruda batalla comercial -sobre todo por parte de las compañías low cost, que compiten agresivamente en precio y cuentan con la aquiescencia de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) en su intento por promover la diversidad de tarifas en el mercado-, hay mucho respeto entre las operadoras a la hora de tomar la decisión de incrementar los precios por el temor a perder clientes. En un momento como el actual, en el que las familias recortan más el presupuesto ante la escalada sin precedentes del recibo de la luz, que merma de su poder adquisitivo, dar el paso es casi como un salto al vacío.

La cautela, por tanto, es la tónica predominante en el mercado. Así lo reflejan los datos del recomendador de tarifas Ysi, que, si bien en su radiografía de mayo detectó 28 variaciones, estas fueron muy poco relevantes en cuestión de precios y condiciones para los usuarios, lo que contrasta con la evolución del IPC en ese mes, que repuntó al 8,7%.

«No ha habido grandes cambios en la política de precios de las operadoras» en el último mes, constata Beatriz Montalvo, directora general de Ysi, que subraya que las promociones más comunes fueron las de ofrecer más gigas por el mismo dinero, lo que «no deja de ser una bajada de precio», matiza.

«La lectura es: a pesar de la que está cayendo, las operadoras resisten a la inflación», resume, pero admite que el balance de estas compañías «cada vez está más complicado por la situación actual».