Economía
Petroleras

Imaz (Repsol): «¿Se puede sostener que es social penalizar al que invierte y crea riqueza en España?»

  • Eduardo Segovia
  • Corresponsal de banca y empresas. Doctor y Master en Información Económica. Pasó por El Confidencial y dirigió Bolsamanía. Autor de ‘De los Borbones a los Botines’.

El consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, ha respondido a los recientes ataques de la ministra Teresa Ribera preguntándose si es social un impuesto que penaliza al que invierte y crea riqueza en España, y favorece al que la crea en otro país. Asimismo, cree que las políticas del Gobierno no están favoreciendo la descarbonización, sino todo lo contrario.

«Si alguien invierte en España y crea empleo industrial en España tiene que pagar un impuesto. Un extranjero que no invierte, que lo produce en otro país y lo importa a través de un puerto español no paga nada. ¿Hay alguien que pueda sostener con la mirada alta que esto es social? ¿Un gravamen que discrimina al que invierte en España y favorece al que no invierte y crea riqueza en otro país, es social, es de sentido común?», se ha preguntado Imaz en la presentación de los resultados y el plan estratégico de Repsol.

El consejero delegado ha puesto como ejemplo los cables de alta tensión, que Repsol fabrica en España, una parte en Tarragona y otra en Aragón, o el queroseno para aviación. En ambos casos, afirma que tienen que competir con productos similares que vienen de países como TurquíaIndia, que no están gravados por el impuestazo de Pedro Sánchez.

No obstante, ha mostrado su confianza en que se reformule este gravamen: «Empiezo a pensar que en las últimas semanas estamos viendo cosas diferentes. El 30 de noviembre hubo un pronunciamiento de la Comisión Europea que dijo que esos impuestos extraordinarios no tienen sentido y van en contra de la seguridad del suministro, y que el sector energético necesita un fuerte volumen de inversión que se podía ver perjudicado por ese gravamen. El propio presidente del Gobierno dijo que este gravamen debe reformularse porque la prioridad tiene que ser fomentar la inversión».

Respecto a las inversiones que Repsol anunció que iba a paralizar, ha reiterado que su ejecución dependerá de esta reforma del impuesto. «Las inversiones pueden hacerse o no hacerse. Tenemos una batería de proyectos preparados, seguimos trabajando en ellos y son apuestas de mucho interés para España y para Repsol. Esperamos que se den las condiciones de estabilidad fiscal y regulatoria que nos permitan llevar a cabo estas inversiones». «Si uno no ve un horizonte de rentabilidad de las inversiones, no puede hacerlas», ha añadido Imaz, que ha asegurado que «no tenemos prisa en la toma de estas decisiones» y que mantiene el diálogo abierto con el Gobierno.

Ataques de Ribera

El número dos de Repsol también ha respondido a los recientes ataques de Ribera en los que le acusaba de «negacionista» y retardista»: «No he dicho que hay que ralentizar la transición energética, digo que hay que ser más inteligentes. Hemos tenido problemas con la seguridad del suministro en Europa, y los precios energéticos siguen siendo altos, lo que hace que los ciudadanos estén penalizados y las industrias europeas tengan más costes  que sus competidores asiáticos o americanos. Además, las emisiones de CO2 se están exportando a otros países, no reduciéndose».

«Acelerar la transición energética es bajar las emisiones, pero no las estamos bajando. Cuando cierra una fábrica en Europa, se va a Turquía, India o China y se crea allí el empleo. Se pierde poder adquisitivo en Europa y las emisiones no bajan sino que aumentan: en esos países se produce con menos cuidado y además hay que transportar el producto hasta aquí».

Ha concluido que «no quiero que frenemos la transición, quiero que la hagamos más inteligente, que esté basada en nuestras capacidades y fortalezas, que tenga en cuenta a sectores básicos de la economía española como la automoción o la agricultura, y que miremos lo que se emite fuera de Europa. De lo contrario, estamos discriminando al europeo».