Goirigolzarri asegura que el rescate de Bankia fue «una buena decisión»

El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, ha defendido este domingo que el rescate bancario a esta entidad fue «una buena decisión» para la economía y los ciudadanos ya que ha permitido que en 2017 la actividad de la entidad contribuyera al PIB español en más de 4.600 millones de euros.

En una tribuna escrita por Goirigolzarri y remitida a EFE, el presidente de Bankia ha incidido en que si la entidad no hubiera sido rescatada, el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD), que cubre los primeros 100.000 euros al depositante, hubiera tenido que hacer frente a 60.580 millones de euros, «prácticamente el triple del dinero público que efectivamente se inyectó en Bankia (22.424 millones), importe que en aquel momento no tenía el FGD».

«¿Quién hubiese aportado ese dinero? ¿Y qué hubiera pasado con el resto de depósitos por valor de más de 52.000 millones que no estaban cubiertos por el Fondo?», pregunta Goirigolzarri tras afirmar que lo hubiesen perdido todo y se habrían destruido 21.000 puestos de trabajo.

Con motivo, este martes, del quinto aniversario de la presentación del plan de reestructuración y primer plan estratégico del banco, Goirigolzarri ha recordado que la reconversión de la entidad termina el próximo mes y que se han conseguido todos los hitos marcados en el mismo.

Sin embargo, apela a «seguir trabajando» para generar el máximo valor y aumentar todo lo posible la devolución de las ayudas recibidas al tiempo que puntualiza que hasta la fecha Bankia ha generado para el Estado un total de 1.838 millones de euros, además de los cerca de 5.000 millones que se han devuelto a los preferentistas y accionistas minoritarios.

«Con independencia del saldo final que resulte de la completa privatización, el rescate a este banco solo puede entenderse como una decisión positiva para España», señala en su exposición.

El presidente de Bankia explica que este rescate no benefició a los consejeros, «que fueron cesados sin recibir ninguna indemnización», ni fue un rescate a los accionistas ni a la plantilla, ya que se produjo una «drástica reducción» de empleos y de sus condiciones económicas.

Según afirma en la tribuna, el rescate de Bankia se diseñó con el único y legítimo propósito de salvar a las personas y a los depositantes del banco. Además argumenta que la liquidación de la entidad hubiera generado una gran inestabilidad en todo el sistema financiero español y dice que las ayudas que recibió ayudaron a bajar la prima de riesgo de España que cotizaba por encima de los 600 euros en aquel momento.

«El paso de los años y la evolución de este indicador ha demostrado la oportunidad y acierto del plan de salvamento», insiste tras recordar que cada reducción de 100 puntos básicos de la prima supone un ahorro para los contribuyentes de 10.000 millones de euros anuales en el pago de intereses.

Goirigolzarri asevera que Bankia es hoy una entidad completamente distinta de la que apeló a la solidaridad y al apoyo de todos los contribuyentes.