El día después de la derrota contra el Atlético de Madrid en los octavos de final de la Copa del Rey por Valdebebas ha sido de borrón y cuenta nueva. Si bien es cierto que Ancelotti y los jugadores del Real Madrid abandonaron con caras muy serias el Metropolitano, dolidos por una eliminación que se puede definir como injusta, ya que los blancos fueron mejores que su rival, especialmente en la primera mitad, tanto el cuerpo técnico como la plantilla entienden que dentro de que una derrota nunca es positivo, teniendo en cuenta la situación, también es un «alivio».
«Una derrota nunca es positiva, pero es un alivio», explican desde el vestuario del Real Madrid horas después de perder contra el Atlético de Madrid. Ancelotti y su cuerpo técnico son plenamente conscientes de que estas semanas libres de partidos les va a permitir mejorar notablemente el nivel físico de una plantilla machacada por las lesiones que, en estos momentos, sólo tiene tres jugadores en la enfermería: Militao, Alaba y Courtois.
Ancelotti y su equipo aprovecharán estas semanas libres de partido para poder recuperar las piernas de los jugadores, que terminaron muy machacadas tras disputar una intensísima Supercopa de España en Arabia Saudí que terminaron ganando tras vencer al Atlético de Madrid en semifinales y al Barcelona en la gran final.
En el Real Madrid no están contentos con la derrota, el escudo que llevan en el pecho no les permite eso, pero sí han decidido ver el vaso medio lleno. Lejos de crear un mal momento por perder contra el Atlético, un partido donde tuvieron la oportunidad de ganarlo, han decidido centrarse en todo lo que viene por delante, con la Liga y la Champions como grandísimos objetivos.
Un calendario que les beneficia
El Real Madrid sólo jugará dos partidos fuera de la capital de España entre los meses de enero y febrero. Uno, en el último fin de semana del primer mes del año, en Gran Canaria contra Las Palmas, mientras que el otro será frente al Leipzig en Alemania, en encuentro correspondiente a la ida de los octavos de final de la Champions.
Por otro lado, el Real Madrid jugará cuatro partidos en el estadio Santiago Bernabéu contra Almería, Atlético de Madrid, Girona y Sevilla, mientras que también visitarán en el mes de febrero el Coliseum para verse las caras con el Getafe e irán a Vallecas, donde les espera el Rayo Vallecano.
Por lo tanto, en las próximas semanas, Antonio Pintus se pondrá a los mandos para poner a tono el físico de los jugadores del Real Madrid. Como es habitual en el plan del preparado italiano, el objetivo es llegar con el depósito de gasolina lleno al tramo final del curso, donde se juegan los títulos.
En la sierra física de Pintus estaba planeado llegar a este mes de enero y febrero en la llamada zona valle, donde las piernas de los jugadores del Real Madrid no están en su mejor momento. Un peaje que deben pagar para llegar a tope al tramo decisivo del curso, aunque es cierto que esfuerzos superlativos como los de la Supercopa de España y la Copa del Rey no ayudan a los madridistas.
El Real Madrid centra el objetivo
En el vestuario del Real Madrid eran plenamente conscientes que si había un desgaste prescindible era el de la Copa del Rey. Ni siquiera el de la Supercopa de España, ya que los blancos podían ganar un título en dos partidos, tal y como sucedió la pasada semana en Riad, capital de Arabia Saudí. Pero la Copa del Rey era un esfuerzo extra teniendo en cuenta que los huevos se tienen que poner en la cesta de la Liga y de la Champions.
El Real Madrid tratará de dar un zarpazo a la Liga cuanto antes y el próximo mes de febrero es importante. Los blancos jugarán tres partidos en casa, dos de ellos ante rivales directos como Girona y Atlético de Madrid, y dos fuera, pero, como hemos dicho anteriormente, sin tener que montarse en el avión, ya que serán en Getafe y Vallecas. Por lo tanto, si los blancos son capaces de sacar adelante con la mejor nota posible estos compromisos, sin olvidarse de los duelos contra Almería y Las Palmas, la lógica dice que tendrán el campeonato nacional muy encarrilado.
Por otro lado, está la Champions. Seis partidos para volver a jugar una final. El primer escollo es el Leipzig en un cruce que se antoja complicado y físico. Los madridistas esperan tener la Liga lo más encarrilada para poderse centrar en la Champions cuando haga acto de presencia la competición continental.
Militao, el único que podría regresar
Ancelotti y los suyos también esperan que las lesiones les respeten tras una temporada muy dura. En este tramo final del curso no cuentan ni con Courtois ni Alaba, pero sí con Militao. Lo normal es que el brasileño esté listo para finales de marzo o principios de abril. Tendrá que adquirir el ritmo competitivo, pero sin duda será un efectivo que los blancos agradecerán.