Con sufrimiento, pero con un hilo de vida. El Real Madrid logra una victoria agónica ante el Granada para mantenerse a la espera del milagro en la Liga F. Las de Alberto Toril se llevaron los tres puntos en el Nuevo Los Cármenes –abierto para la ocasión– gracias a la de casi siempre, Linda Caicedo en el 85′ que rompía el empate a uno. Y, es que, las nazarís habían neutralizado el gol de Caroline Weir con un tanto de Edna Imade. Un triunfo que las mantiene a la espera de dos milagros en las dos jornadas que restan.
Llegaban las madridistas obligadas a ganar para evitar el alirón del Barcelona este mismo domingo. Visitaban al Granada para volver a ponerse a un punto de las azulgranas, que tenían un compromiso bastante asequible contra el Deportivo de La Coruña en casa. A falta de tres jornadas para el final, las blancas necesitaban ganar todo y esperar dos fallos culés, algo prácticamente imposible y más teniendo en cuenta el calendario que le queda al Barça.
Salió prácticamente con todo Toril, dejando en el banquillo a Misa, Olga y Athenea del Castillo y dando entrada a Chavas, Yasmim y Feller. Además volvía Leupolz, lesionada en la victoria ante el Arsenal en Valdebebas, aunque no era de la partida en una medular formada por Angeldahl y Toletti.
No podían fallar las blancas y no dieron margen a la especulación. Caroline Weir las adelantaba en los primeros minutos de juego, en el 11′. La escocesa suma y sigue, ampliando sus registros como máxima anotadora de la historia del club. De un centro de Yasmim desde la izquierda conectó una volea Bruun. El rechace lo cazó la británica para marcar por tercera jornada consecutiva en el campeonato.
En lugar de poner tierra de por medio, el partido entró en punto muerto y apenas pasó nada relevante hasta el descanso. Sólo una oportunidad de Feller, de nuevo tras un envío de Yasmim, pero la francesa estrelló el disparo en el palo. Llegaba, por tanto, el partido vivo a un segundo tiempo en el que el Granada buscó las cosquillas de las blancas, encontrándolas.
Aunque, antes del gol, Alba Redondo, que había ingresado ya en el terreno de juego, pudo dar prácticamente carpetazo al partido. De cabeza pudo poner el segundo, pero el balón se marchó por muy poco. Entonces apareció Edna, para darle emoción al partido y dejarle en ese momento el título en bandeja al Barcelona.
Pero si hay algo que caracteriza al Real Madrid esta temporada es su capacidad para apretar en el tramo final para cerrar sus partidos. Fue así contra el Madrid CFF, al que terminaron goleando, y repitieron el método contra el Granada.
En el 85′ llegó el tanto de las blancas, por medio de Linda Caicedo. María Méndez le filtró un pase a la colombiana, que no perdonó y con un derechazo dio los tres puntos a las madridistas. Tres puntos que evitaban el alirón casi instantáneo de un Barça que ya iba ganando al Dépor y que podrá proclamarse campeón si consigue ganar uno de sus dos próximos partidos, ante Betis y Athletic. Mientras tanto, las blancas esperan sendos milagros que permitan un campanazo histórico.