Eduardo Camavinga afronta su quinta temporada en el Real Madrid. Desde que desembarcara en el club blanco en la recta final del verano de 2021 el jugador francés no ha logrado asentarse como titular brillando en muchas fases como revulsivo desde el banquillo.
A la sombra de Casemiro, Kroos y Modric en sus inicios en el club, la progresiva salida del recordado trío de centrocampistas tampoco ha cambiado su rol. Brillante desde el banquillo en la decimocuarta Champions del Real Madrid, Camavinga no ha conseguido establecerse como referencia en la medular más allá de destellos puntuales.
Los problemas físicos han sido uno de los principales motivos del estancamiento del jugador. Como muestra, una última campaña en la que tan sólo participó en la mitad de los partidos en Liga (19) y en 9 de los 14 de la Champions League. Su falta de rodaje ha propiciado que no pueda desarrollar todo su potencial. Ante la ausencia de Camavinga, su compatriota Tchouméni tomó el mando del centro del campo del equipo; reponiéndose a los pitos del Santiago Bernabéu y convirtiéndose en indiscutible para Carlo Ancelotti.
Con la salida del italiano y la llegada de Xabi Alonso al banquillo merengue se presenta una nueva oportunidad para el francés. Valverde y Tchouméni apuntan a ser fijos en el once, como se demostró en un Mundial de Clubes en el que apenas descansaron. Como acompañante han tenido a un Arda Güler reconvertido a interior. El turco ha retrasado su posición para ayudar en la salida de balón, un aspecto en el que el Real Madrid sufrió a lo largo de la pasada temporada.
La hora de Camavinga sin Modric
Camavinga parte con cierta desventaja respecto a sus compañeros, ya que una lesión en el tendón del aductor izquierdo le hizo perderse el Mundial de Clubes. En Estados Unidos apuró sus opciones, llegando a entrar en la convocatoria ante el PSG.
De cara a la campaña 2025/26 se espera que, a sus 22 años, el galo acompañe a sus grandes cualidades físicas y técnicas una mejor lectura del juego. Parte de su trabajo para convencer a Xabi Alonso pasa por dar un paso hacia delante en salida de balón, donde se ha mostrado errático pese a contar con la calidad necesaria para hacerlo.
La falta de efectivos en el mediocampo es uno de los principales problemas de la plantilla merengue y, a su vez, una oportunidad para Camavinga. El Real Madrid decidió no acudir al mercado en busca de un perfil similar al de Luka Modric. Un hecho que se ha agravado tras la baja de Jude Bellingham, que acostumbra a actuar como enlace entre los centrocampistas y la delantera.
Eduardo Camavinga tiene 11 días para convencer a Xabi Alonso antes del debut liguero ante Osasuna el 19 de agosto. El técnico elegirá entre una terna de futbolistas entre la que también están Dani Ceballos, Arda Guler o el recién llegado Franco Mastantuono.