El Movistar Arena se convirtió en la noche del pasado lunes en un dormitorio gigante y en un refugio para todos aquellos ciudadanos que se habían quedado tirados en Madrid sin un sitio donde poder dormir a causa del apagón que dejó a casi toda España sin luz durante más de 9 horas. Un recinto que esta noche acogerá el tercer partido del playoff de la Euroliga entre Real Madrid y Olympiacos, donde los blancos están obligados a ganar para seguir vivos en la competición después de perder los dos primeros en Atenas.
«Como ha anunciado la Presidenta de la Comunidad de Madrid, el Movistar Arena permanece abierto 24 horas para que cualquier viajero que lo necesite pueda pernoctar. Acceso por fachada principal (Felipe II) Para más información 914449950», informó la cuenta del Movistar Arena a través de sus redes sociales poco antes de las 00:00 de la noche.
La Comunidad de Madrid convirtió este pabellón acostumbrado a acoger eventos deportivos y conciertos en un dormitorio gigante para que cientos de ciudadanos pudiesen descansar tras un apagón que desordenó la vida de miles de españoles el pasado lunes.
El Movistar Arena estuvo abierto durante toda la noche y todo aquel que lo necesitó pudo pasar allí la noche. Y es que miles de ciudadanos se quedaron anoche tirados en la capital después de que sus trenes no pudiesen salir desde la capital o se quedaran allí tirados de un destino a otro.
El Real Madrid tiene una final en el Movistar Arena
Un Movistar Arena que esta noche se vuelve a convertir en un recinto deportivo para acoger una auténtica final para el Real Madrid de baloncesto contra Olympiacos en la Euroliga. Los de Chus Mateo necesitan ganar de manera obligatoria para no despedirse ya de su temporada en Europa.
El Real Madrid afronta este martes una cita decisiva ante el Olympiacos griego en el tercer partido de los cuartos de final de la Euroliga, en el que no tiene margen de error después de las dos derrotas cosechadas en Atenas y necesita una victoria para seguir soñando para optar a luchar por el título.
El 2-0 en la eliminatoria al mejor de cinco encuentros hace que los de Chus Mateo estén obligados a ganar ante su afición en el Movistar Arena (21.00h) para tratar de forzar al menos el cuarto partido este jueves.
La tarea es compleja para el conjunto madridista a tenor del desarrollo de los dos duelos disputados en el pabellón de La Paz y la Amistad, donde los helenos fueron superiores, si bien en el segundo de ellos los blancos experimentaron una mejoría.
El cuadro que dirige Georgios Bartzokas, líder de la fase regular de la Euroliga, se mostró sólido ante su hinchada, con su estrella el búlgaro Aleksander Vezenkov a un nivel excelente, con 23 y 22 puntos en los dos choques.
En la liguilla regular el Olympiacos también ganó los dos partidos al Real Madrid, que también tiene la estadística en contra en la Euroliga al haber superado solo una eliminatoria, en la que no disponía del factor cancha a su favor.
Fue en 2018 cuando dejó en la cuneta a Panathinaikos por 1-3, una gesta que completó con su décimo título en la máxima competición continental. A pesar de todo, Chus Mateo, técnico blanco, ve factible llegar a la final a cuatro de Abu Dabi, del 23 al 25 de mayo. «¿Vamos a remontar?, si me lo pregunta un aficionado le diría que sí, sin duda ninguna, porque ellos también tienen que tener la ilusión, la esperanza y la fe, que nosotros tenemos. Hemos ido salvando finales y seguimos peleando y en pie», dijo el técnico madridista en rueda de prensa en la ciudad deportiva, donde la plantilla pudo entrenar a pesar del apagón que ha afectado a toda España.
No obstante, Mateo recomendó cautela porque, a su juicio, ganar tres partidos seguidos a Olympiacos requiere de algo más que optimismo: «estamos hablando de trabajo, de tratar de reducir las pérdidas y los rebotes de ataque, de seguir haciendo unas buenas defensas».