El madridismo celebró la Decimoquinta Copa de Europa de su historia al ritmo del famoso y mítico «¡qué viva España!» sobre el césped de Wembley. Los jugadores del Real Madrid celebraron la consecución de la Liga de Campeones con su afición mientras sonaban varias canciones. Tras el himno de la entidad madridista, y varios cánticos de toda la vida, el «qué viva España» retumbó en la capital británica y los hinchas blancos sacaron sus banderas españolas a relucir en el estadio inglés.
El madridismo no podía contener la sonrisa, las lágrimas y los gritos de euforia sobre el césped de Wembley tras conquistar la Copa de Europa por decimoquinta vez. Todo era alegría en el fondo madridista del Real Madrid desplazado a la capital británica.
Cuando sonó el mítico»¡qué viva España!», la hinchada madridista se volvió loca en Wembley. Cantó, gritó y sacó todas sus banderas de España para celebrar en la capital de Inglaterra que el Real Madrid vuelve a ser campeón de Europa. Una vez y por decimoquinta vez en su historia.
El Real Madrid volvió a tirar de carácter y corazón para ganar una nueva Copa de Europa, la decimoquinta de su historia. Los blancos sufrieron, y mucho, contra el Borussia Dortmund, sobre todo en un primer tiempo donde los alemanes fueron superiores, pero perdonaron a los blancos. Y si perdonas al Rey de Europa lo pagas.
El Real Madrid en la segunda mitad se levantó y empezó a coger buenas sensaciones hasta que Dani Carvajal puso el 0-1 en el minuto 73 con un gran cabezazo después del último servicio de Toni Kroos a la entidad blanca tras un centro exquisito. Diez minutos más tarde, donde el Madrid fue muy superior, llegó el segundo, obra de Vinicius, para marcar su segundo gol en su segunda final, y levantar así su segunda Champions, la sexta de jugadores como Carvajal, Nacho, Modric y Kroos. Y la Decimoquinta del Rey de Europa.