Los Reyes Magos de Oriente también han pasado por Liverpool y le han dejado un regalo a Jürgen Klopp, aunque más bien se podría decir que es carbón porque se ha confirmado una de las peores noticias para el conjunto red. El técnico alemán ha confirmado que Virgil van Dijk estará más de un mes de baja y tendría muy difícil llegar al partido de ida de los octavos de final de la Champions League contra el Real Madrid.
Van Dijk es un pilar fundamental en los esquemas del preparador germano. El central neerlandés se retiró lesionado durante el último partido contra el Brentford e hizo saltar todas alarmas. En un principio, el club inglés comunicó que se trataba de una lesión en el tendón de la corva pero la prensa británica no tardó en indicar que la lesión era más grave de lo esperado. Y así ha sido.
Klopp ha confirmado este viernes en la rueda de prensa previa al partido contra el Wolves que «ha sido un diagnóstico duro. Hablamos de semanas, más de un mes, pero espero que vaya rápido. Tenemos otros centrales». El preparador alemán estaba desolado tras comunicar la pérdida de su mejor defensor para el próximo mes.
El partido de ida de octavos de final de la Champions contra el Real Madrid es el próximo 21 de febrero, es decir en un mes y medio. Aunque el técnico confía en que se recupere rápido, la presencia de Van Dijk en dicho enfrentamiento está en el aire y en caso de llegar lo haría muy justo, sin casi rodaje.