Con la autorización del Gobierno para reanudar la Liga a partir del 8 de junio, el Real Madrid ya se prepara para la desescalada, que culminará con la vuelta a la ‘nueva normalidad’. El conjunto madridista afrontará con varios cambios significativos lo que queda de campeonato, respecto a lo visto antes de que llegase el parón. La planificación dado un vuelco en relación a lo previsto de cara a este final antes de que se suspendiese todo.
Hay varios aspectos que deberán afrontar los madridistas con el regreso de la competición que serán, además, claves. Los blancos se preparan para un calendario mucho más apretado de lo normal, en el que afrontarán sus partidos como locales en un nuevo estadio. Además, Zidane contará con dos ‘fichajes’ de lujo este verano, que reforzarán su más que necesario fondo de armario.
Un calendario comprimido
Los blancos se preparan para un calendario mucho más apretado de lo que parecía. La competición quedará cuadrada de tal forma que apenas habrá descanso entre partidos, pues todo apunta a que deberán disputarse dos jornadas a la semana si se quiere terminar antes de agosto.
Con 11 jornadas por disputarse, los de Zidane recibirán a seis rivales en casa: Eibar, Valencia, Mallorca, Getafe, Alavés y Villarreal. Además, tendrán cinco salidas, entre las que figuran plazas complicadas como San Mamés o Anoeta, con la ventaja de que no habrá público en sus gradas. Además de visitar al Athletic y a la Real Sociedad, los madridistas jugarán a domicilio ante Espanyol, Granada y Leganés.
La mudanza al Di Stéfano
Otro aspecto que tendrá que tener en cuenta el conjunto blanco en esta desescalada será el cambio de estadio. Con las obras del Santiago Bernabéu más avanzadas de lo previsto, los madridistas se mudarán al Alfredo di Stéfano de Valdebebas para disputar lo que queda de temporada. Un cambio que, de ir bien, se prolongaría durante la próxima campaña, hasta que se permita la asistencia de público a los recintos deportivos.
Dos fichajes de lujo
El mercado aún no se ha abierto, pero el Real Madrid contará con dos ‘fichajes’ para este tramo final. Se trata de Marco Asensio y Eden Hazard, que no estaban disponibles para los últimos meses de Liga por lesión, pero gracias al parón se han recuperado a tiempo para ayudar al equipo en las últimas jornadas.
Asensio se lesionó antes de empezar la temporada, pero parecía complicado que pudiera volver antes de que terminase. Los plazos de su recuperación apuntaban a que llegaría justo, pero la falta de ritmo le habría condenado a no jugar. Ahora, se cuela de lleno en los planes de Zidane para los dos meses intensos de fútbol que, como mínimo, quedarán.
El belga, por su parte, también se había despedido de la temporada, tras volver a lesionarse apenas dos partidos después de superar la anterior. Después de una temporada en la que no ha terminado de mostrar su mejor fútbol, podrá resarcirse siendo pieza clave para los blancos en la lucha por el título.
Volverán las rotaciones masivas
Zinedine Zidane tendrá de nuevo un papel fundamental a la hora de gestionar la plantilla en búsqueda de una nueva Liga. El técnico estará obligado a volver a tirar de su segunda unidad si no quiere mermar demasiado a sus titulares. Los jugadores deberán enfrentarse a unas condiciones climáticas extremas, además de contar con pocas semanas de preparación para estar al cien por cien, de ahí que el francés deba poner en marcha de nuevo su fórmula estrella.
Si algo ha demostrado Zidane es la capacidad para mantener a casi todos los futbolistas de su equipo enchufados, haciéndoles sentir importantes. Y ahora lo serán más que nunca. Las rotaciones masivas apuntan a volver dado lo apretado del calendario y, esta situación, favorece a los blancos respecto a su principal rival. El FC Barcelona cuenta con menos fondo de armario que los madridistas.