El Real Madrid Castilla depende de sí mismo para alcanzar el playoff de ascenso. El filial blanco se había complicado sus aspiraciones de estar el próximo curso en Segunda División, tras una mala racha que les llevó a sumar cinco partidos seguidos sin ganar. Sin embargo, en el momento menos esperado, ante el líder e imbatible Badajoz, y con el equipo mermado por las obligaciones del primer equipo y varias ausencias de renombre, Arribas tiró de galones para darle la victoria al equipo.
La mayor promesa con la que cuentan en La Fábrica -con permiso de Antonio Blanco y de Miguel Gutiérrez- se exhibió en la victoria de los blancos por 3-1 contra el que probablemente sea el mejor equipo de la categoría. Un doblete del mediocentro en la primera mitad adelantó por dos veces al segundo equipo madridista, que confirmaron ya en la segunda su victoria con un tanto de penalti de Hugo Duro.
No ha llegado en buen momento el Castilla a la segunda fase de esta temporada en Segunda B. Los madridistas pelean por la promoción, pero se han visto condicionados por las necesidades del primer equipo y por el coronavirus. Después de caer ante el Extremadura, en el partido que no se debió jugar, el filial llegaba obligado a ganar al líder e imbatible Badajoz, que a pesar de estar clasificado para el play-off como primer de grupo, sigue arrollando.
Con un equipo de circunstancias, Raúl se presentaba ante el conjunto pacense buscando la primera victoria de los últimos seis partidos, que les permitiese depender de sí mismos en la última jornada de la Liga. Plantaba el técnico, sobre el césped del Campo 7 de Valdebebas, a un equipo sin Blanco ni Miguel Gutiérrez -tras jugar con el primer equipo ante Osasuna- y sin otros cinco titulares, como Chust o Marvin.
Exhibición de la perla de la cantera
Sí que estaba Arribas, que ejerció de líder del equipo y sacó los tres puntos con dos golpeos espectaculares. En el minuto 10 adelantaba al equipo con un tanto desde el círculo central. Tras una recuperación de Peter, el ’22’ del Castilla controlaba, veía adelantado a Saldaña y se sacaba un magnífico golpeo, que se colaba prácticamente rozando el larguero.
Era el 1-0, que llegaba después de un inicio en el que el dominio lo había tenido el Badajoz. El conjunto extremeño siguió llevando la iniciativa del encuentro y buscó insistentemente el empate, que llegó un cuarto de hora después. Antes, Toni Fuidías tuvo oportunidades para lucirse, con dos paradones. Primero, con una mano abajo para evitar el gol tras un potente disparo desde fuera del área y, después, con una estirada para evitar que el balón entrase por la escuadra.
El empate llegó tras un pase desde el lateral de Corredera para Forgas, que disparó en primera instancia, estrellando su balón en Pablo Ramón. El rechace le quedó muerto y aprovechó para batir a Fuidías, que no pudo hacer nada.
Siguió intentándolo el Badajoz y parecía que era cuestión de tiempo que remontase el partido. Sin embargo, volvió a aparecer Arribas. La perla de la cantera lanzaba una falta desde el pico derecho del área y la colaba por el palo corto, tras superar por el exterior la barrera pacense al filo del descanso.
Polémica y sentencia de Duro
Pero el Badajoz no estaba dispuesto a tirar la toalla. El campeón del Grupo 5 de la división de bronce seguía apretando ante un Castilla que se defendía como podía y al que el palo salvó del empate apenas tres minutos después del doblete de Arribas. Antes de que el colegiado decretara el final del primer tiempo, dio tiempo para una más, en la que Forgas marcaba, aunque el línea señalaba un polémico fuera de juego que invalidaba la acción.
Comenzaba el equipo de Raúl el segundo tiempo con la necesidad de aguantar el resultado y muy pronto se le puso de cara. Hugo Duro aprovechó un balón en profundidad para entrar en el área y tratar de zafarse de Saldaña, que le derribó y cometió penalti. Lo transformó el delantero madridista, que había partido desde el banquillo, pero la lesión de Latasa en el minuto 20 le hizo saltar al terreno de juego.
El décimo gol del jugador cedido por el Getafe le daba la suficiente tranquilidad a los blancos para afrontar la segunda mitad, en la que el Badajoz siguió intentándolo, pero no llegó con peligro excesivo hasta el descuento. Al final, los blancos consiguieron su primera victoria en esta segunda fase, con la que se colocan de nuevo en la tercera plaza, aprovechando las derrotas de Extremadura y Talavera.
Se jugarán en la última jornada entrar en la promoción ante el conjunto manchego, que también tiene opciones. Dependen de sí mismos para ser terceros, pero deberán imponerse a domicilio. De hacerlo, serán matemáticamente equipo de playoff, mientras que si empatan tendrán que esperar un empate en el partido decisivo que medirá al Extremadura y al Inter de Madrid. Si pierden, se quedarán fuera de la promoción.
