A sus 18 años, Eli John Ndiaye es el jugador más joven en la expedición del Real Madrid en Kaunas. «El año pasado estaba disputando el Next Generation (el torneo para equipos juveniles de la Euroliga) y hoy estoy aquí. Solo estoy disfrutando de esta oportunidad», resume con su hablar tranquilo en declaraciones a OKDIARIO, sentado sobre el parqué del Zalgirio Arena, donde esta noche vivirá un Clásico inolvidable frente al Barcelona.
Nacido en la localidad senegalesa de Guediawaye, Ndiaye llegó al Real Madrid en 2017 para jugar en categoría infantil y ya cumple su sexta temporada en el club. Habla español a la perfección y siempre tiene las orejas muy abiertas para escuchar los consejos de veteranos como Sergio Llull o Rudy Fernández, quien ya estaba consolidado en la élite cuando Eli ni siquiera había nacido.
«Me aconsejan que juegue como yo sé, que disfrute, defienda bien, ataque y ayude en todo lo que necesiten ellos. Me dicen que no tenga presión ni esté nervioso. Me ayudan mucho en los entrenamientos», explica Ndiaye, muy orgulloso también de la confianza que le ha entregado su entrenador. «Chus me ha ayudado desde el principio, me ha dicho las cosas claras. El equipo confía en mí, el técnico también confía en mí y sé que puedo hacerlo bien», dice.
Ndiaye empezó a protagonizar sus primeros titulares de prensa hace dos meses, cuando completó su mejor partido como profesional en un encuentro de Liga Endesa contra el Bilbao Basket. Ese día, se marchó del WiZink Center con 14 puntos, 4 rebotes y 15 de valoración, números más que respetables para un muchacho de su edad.
🔝 El MEJOR PARTIDO de @johnny_eli04 en #LigaEndesa:
1⃣4⃣ puntos
1⃣5⃣ valoración #ListosParaRomperla pic.twitter.com/f3cq9umYP5— Liga Endesa (@ACBCOM) March 12, 2023
Los problemas de bajas que arrastra el Real Madrid en el juego interior (Yabusele, Deck, Poirier) han acelerado la progresión de Ndiaye, aunque también es de justicia decir que en el quinto partido contra el Partizan, cuando fue la gran sorpresa del equipo en el quinteto titular, dejó en el banquillo dos ‘4’ puros como Petr Cornelie y Anthony Randolph.
Aquel día, el senegalés se vació en defensa para obstaculizar a una de las grandes estrellas del Partizan, Zach Leday. Se marchó eliminado por cinco faltas personales, bajó una gran ovación del WiZink Center y elogiado por Chus Mateo en la rueda de prensa posterior. Este viernes, el toro es aún más grande, Nikola Mirotic, pero Ndiaye está listo si su técnico le vuelve a reclamar. «Mirotic es un gran jugador, todos los sabemos. Intentaremos defenderlo bien y pararlo lo máximo posible», finaliza.