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La recuperación de hombres como Asensio y Bale le condena

Isco es un «caso perdido» para Solari

Isco no ha disputado ningún minuto en los dos últimos partidos del Real Madrid. El malagueño sigue sin contar demasiado con Solari y, ante la recuperación de Bale, Asensio y Mariano, la grada podría ser su destino en más de una ocasión.

Isco Alarcón cada vez cuenta menos para Solari. El malagueño se ha convertido desde la llegada del argentino en un habitual del banquillo madridista. Comenzó a sorprender su suplencia en los primeros encuentros del Real Madrid, pero con el paso de los partidos, ha dejado de ser noticia. El malagueño no está teniendo todos los minutos que se corresponden con su calidad y en los próximos partidos podría ser peor, pues podría terminar en más de una ocasión en la grada.

La cruzada que mantiene con él el técnico le ha llevado a jugar de inicio únicamente tres encuentros bajo su mando. Ni siquiera la plaga de lesiones que ha azotado a la plantilla en los últimos meses a llevado a Solari a contar más con él. Tampoco lo ha hecho la carga de partidos del conjunto madridista en lo que llevamos de 2019. Con partidos cada tres días, en los que se ha jugado prácticamente toda la Copa del Rey y la Liga no ha parado, Isco no ha conseguido hacerse con un hueco en el once excepto en una ocasión, acumulando además tres partidos sin jugar.

El mediocentro madridista ha visto como Ceballos le ha ganado la partida en los últimos tiempos, algo a lo que hay que añadir la recuperación de Asensio, Bale e incluso de Mariano, que le pondrá a la cola en cuanto a intenciones de Solari. No sería extraño verle incluso pasar algún partido en la grada. Y es que, ante la reaparición del mallorquín y el galés, Isco no ha contado con minutos en los dos últimos partidos.

El malagueño se ha convertido en un caso perdido para Solari. El argentino le ha condenado al ostracismo y no parece que vaya a retractarse de su decisión. Frente al Espanyol en Liga sorprendía que Isco no jugase, pero podía entenderse ante la necesidad de sus compañeros recién salidos de lesión por coger ritmo cuanto antes. Sin embargo, en la vuelta contra el Girona quedó demostrado que no es una casualidad y que tiene pinta de convertirse en lo habitual.

Isco no jugó en un partido en el que la eliminatoria estaba ya resuelta. Solari prefirió olvidarse de él que darle la oportunidad de saltar al césped y tener minutos en los que demostrar de su calidad. Ahora, ante la llegada de partidos de vital importancia, habrá que ver cómo gestiona Solari las rotaciones, pero viendo que no toca lo que le funciona, todo apunta a que el jugador está sentenciado y que la grada es más que una amenaza.