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EL PORTUGUÉS NO CONSIGUE MARCAR EN SU ESTRENO EN LIGA

Cristiano Ronaldo falló tres goles cantados

Cristiano Ronaldo debutaba en Liga esta temporada tras la suspensión que le mantuvo apartado de toda competición nacional durante cinco partidos. El Bernabéu le esperaba con ganas, tras los dos empates consecutivos en el feudo madridista frente al Valencia y al Levante, pues el principal problema de los de Zidane era la falta de efectividad.

Los problemas de cara al gol en su ausencia eran evidentes. Sólo la aparición de Borja Mayoral en Anoeta hizo evitar un mal mayor. Ante el Betis, Cristiano lo intentó, pero como si de un mal se tratase, no logró poner remedio a la mala racha madridista. El ariete blanco, que formaba con Bale en punta, estuvo muy participativo en el ataque, pero faltó culminar.

El Real Madrid comenzó desde los primeros compases del duelo buscando adelantearse en el marcador. Constantes córners en los que Cristiano buscaba el remate, pero no lograba conectar con el balón. Pero en la primera que tuvo saltó la polémica. El portugués remató de tacón un balón que Ramos cabeceó a sus pies. Tras un rebote, Javi García salvaba en la línea, aparentemente con la mano y los blancos pidieron una pena máxima que Mateu no consideró.

En el minuto 29 tuvo su segunda ocasión de cara a puerta. Bale se la dejó muerta en la frontal y el portugués sacó un disparo seco y raso que atrapó Adán. Minutos después, cabeceaba un centro de Marcelo por encima del larguero. Pero fue en los instantes previos al descanso cuando tuvo más ocasiones.

De hasta tres oportunidades dispondría el luso para cambiar el luminoso antes de marcharse a vestuarios. Primero, su disparo desde la izquierda llevaba buena intención, pero apareció la cabeza de Mandi para mandar la pelota de nuevo a la esquina. Después, tras una buena internada y cuando intentaba zafarse precisamente del argelino, resbaló y perdió el balón. Por último, intentó un difícil remate -casi acrobático- que se marchaba por la línea de fondo.

En la segunda mitad, pasó lo inaudito. Cristiano Ronaldo, que había comenzado la temporada como un tiro, no logró marcar. Y lo que es aún más sorprendente, el Real Madrid tampoco. Cristiano las tuvo, pero abducido por la fatalidad del conjunto madridista de cara a gol, no logró perforar la meta del canterano Adán.

Tenerlas, las tuvo. Sobre todo, nada más comenzar la segunda mitad. Fruto de la fatalidad, primero, volvía a resbalar, esta vez cuando la pegaba; instantes después, una carrera en profundidad de Bale, éste metía el pase de la muerte que acababa rematando Cristiano fuera. Comenzaban a aparecer los fantasmas en el Bernabéu ante la imposibilidad de los blancos de cambiar el signo del partido. Y la desesperación se hacía mayor entre los blancos.

El luso no volvía a disponer de una ocasión clara para poder dar la victoria a los suyos. El campeón vuelve a quedarse sin marcar 73 encuentros después y, lo que es peor, caía en casa perdiendo comba con el Barcelona, que se queda a siete puntos. Cristiano, presa de la inefectividad madridista, nada pudo hacer por dar los tres puntos a su equipo en su regreso a LaLiga.